Hace un par de meses, los rescatistas de Lega Del Cane Trani se encontraron con uno de los casos más tristes que han conocido. Un hombre se encontraba conduciendo entre Trani y Barletta en Italia y se encontró con algo muy sospechoso.
A un lado de la carretera había una valija destrozada y a unos pocos centímetros estaba un cachorrito de pitbull en los huesos. La forma en la que valija había sido rajada, daba una clara idea de la terrible situación que este peludito había enfrentado.
“¿Cómo es posible que alguien pueda hacer algo así a un ser indefenso?”, se lamentó un usuario en las redes.
Todo parecía indicar que lo habían metido dentro de aquel maletín para lanzarlo y deshacerse de él. De alguna manera, se las ingenió para salir de allí pero parecía completamente agotado y sin fuerzas.
El hombre que lo encontró llamo a los rescatistas y de inmediato lo tomaron bajo su cuidado. La situación del pequeño era realmente difícil.
Tenía muchos problemas estomacales y darle el tratamiento que tanto necesitaba parecía una tarea imposible ya que él no confiaba en ningún humano.
“Los resultados de sus exámenes son realmente dramáticos. Hay anemia, hiperparatiroidismo, insuficiencia hepática, necrosis en algunos tejidos. Tiene el aparato grastoentérico lleno de piedras y cueros extraños”, explicó un portavoz de la Fundación.
Muchos se hubiesen rendido ante un caso tan difícil pero este pobre peludito merecía una oportunidad para llevar una vida feliz.
“Quienes lo encontraron y lo salvaron son unos ángeles”, agradeció un internauta.
Durante semanas continuó sumamente débil pero con el paso de los días recuperó las fuerzas para levantarse y logró comer por sí mismo.
Recibió el nombre de Kei y a pesar de su crítico estado de salud el reto más grande que tuvo que enfrentar fue recuperar la confianza en los humanos.
“No sabemos si es un cachorro inexperto o si su miedo se debe a todo lo que ha sufrido”, dijo uno de los rescatistas.
Poco a poco, el hermoso peludito se ha permitido confiar un poco más en los humanos que ha ido conociendo. Parece comprender que se encuentra cada vez más fuerte y todo gracias a los cuidados de los veterinarios.
Es un alivio saber que el peludito recibió toda la ayuda que necesitaba después de enfrentar un pasado tan doloroso.
“Quien adopte a Kei se llevará un perro al que tendrán que reconstruir física y psicológicamente. Es un gran compromiso”, dijo uno de los rescatistas.
Ningún ser vivo merece que ser encerrado y dejado a su suerte en medio de la nada. Kei todavía tiene un largo camino por delante y esperamos que pueda ser adoptado por una maravillosa familia.
Alzamos la voz en contra de los injustos tratos que este hermoso peludito recibió. Los responsables de un acto tan atroz deben pagar por sus acciones. ¡Comparte!