El trabajo de un bombero suele tener dificultades que pocos conocen y en ocasiones las tragedias pueden causar un gran estrés e impacto en sus estados de ánimo.
Pero para controlar la ansiedad del trabajo, unos bomberos de San Francisco encontraron la terapia perfecta: una dulce gatita que llegó a la Estación y decidieron adoptar.
Sin embargo, una denuncia anónima ha puesto en riesgo la estadía de la felina en la Estación de Bomberos.
Su nombre es Edna, una gatita perdida de carey, que entró en la Estación de Bomberos 49 de San Francisco y fue acogida de inmediato por los generosos bomberos. Edna solía recibir a estos servidores cada mañana con los más tiernos maullidos, además de ser una excelencia en la cacería de ratones.
Todos parecían estar encantados con ella pero una denuncia anónima acabó con el idilio familiar.
El Departamento de Bomberos de San Francisco recibió una queja anónima y decidieron hacer una investigación sobre el caso de Edna.
«El lugar de trabajo en cuestión no es una estación de bomberos, sino una instalación de despliegue de ambulancias donde se alojan suministros médicos, equipos y productos farmacéuticos utilizados por el personal de emergencias a cargo de los vehículos», decía el comunicado emitido por la autoridad del Departamento de bomberos.
Una investigación concluyó que tener al gato en la instalación comprometió la esterilidad de los suministros y equipos utilizados en los pacientes, así que Edna debía encontrar un nuevo hogar de inmediato y la noticia no fue bien vista por los bomberos que se habían encariñado con ella.
Los bomberos pidieron a sus seguidores en las redes que enviaran un correo electrónico pidiendo que Edna se quedara en la estación.
Incluso Edna fue certificada como una gatita de terapia para residentes, como un último esfuerzo para lograr que se quedara en la Estación de Bomberos pero nada de esto funcionó.
La gatita que había vivido por 5 años en el lugar y alegraba los días de más de 200 trabajadores debió abandonarlo.
Por fortuna, Edna no quedó a la deriva y alguien que la conocía decidió quedarse con ella para que la gatita no fuese a quedar a la deriva en un refugio.
«Nos complace informar que un miembro del Centro de Despliegue de Ambulancias se ofreció como voluntario para adoptar a la gata como mascota en su hogar, donde estará bien atendida», informó el Departamento en un comunicado.
Aunque la gatita ya no estará alegrando a todos en la estación, al menos estamos seguros de que está al cuidado responsable de alguien que sabrá velar por ella.
Los bomberos entendieron las causas del desalojo y no podían contrariar a sus superiores pero aún extrañan la presencia de Edna en el lugar. Esperamos que su nuevo dueño la lleve a las reuniones con sus colegas y puedan verla de nuevo.
No te vayas sin compartir esta historia, es necesario que todos vean cómo la simple presencia de una criatura como Edna puede cambiarle la vida a cualquiera.