Las mascotas son parte de la familia, hay que amarlos y cuidarlos mucho pues son muy fieles y amorosos, los perros son un excelente ejemplo de una mascota fiel y cariñosa; es por eso que a muchos les encanta retribuirles ese amor con muchos besos y abrazos.
Es muy común que muchos al llegar a casa sean recibidos por sus perros muy emocionados, por lo que muchos ven necesario tomar al perro en brazos y darle muchos besos. Lo que estas personas no saben es que esto no es totalmente bueno.
Muchos expertos advierten lo peligroso que puede resultar dejar que nuestros perros nos den lengüetazos en la boca o en las mejillas cerca de la boca; a continuación, conocerás el porqué no debes hacer esto.
Nandi, el profesor asistente de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad de Drexel en Filadelfia, Neilanjan, explica que hay una gran cantidad de microbiomas orales de bacterias, virus y levaduras que se encuentran dentro de la boca de nuestras mascotas.
Aunque no todo es negativo, pues Nandi también explica que la saliva de los perros contiene propiedades curativas que colaboran en la limpieza y sanación de heridas; sin embargo, no debería entrar en contacto con nuestras bocas y, según ese texto, en las bocas de los perros existen muchos organismos que nuestro cuerpo no puede tolerar ni combatir.
Aún así, la idea no es prohibirles a nuestros perros que vuelvan a lamernos, ya que muchos de ellos demuestran su cariño de esta manera; además, si la saliva del perro entra en contacto con la piel humana cerrada es imposible que esto cause problemas. Así que, en lugar de tu cara, puedes ofrecerle los brazos u otra parte del cuerpo a tu mascota.
El problema está en el momento en que la saliva del perro entra en contacto con zonas con mucosa, como la boca y nariz, ya que de este modo la saliva puede ingresar a nuestro organismo de manera más fácil y esto debe ser evitado.
Es muy poco probable que la saliva de perro sola como tal nos contagie de enfermedades, pero existen muchos estudios realizados que muestran que los perros luego de comer heces o haber lamido el ano de otro perro, pueden contagiar de enfermedades como anquilostomas y ascárides.
Incluso el presidente Obama habló sobre el tema en una entrevista con la revista Wired que se publicó en agosto: “Sigo sin dejar que Sunny y Bo me laman porque cuando los paseo por el jardín lateral veo algunas de las cosas que levantan y mastican y no, amigo, no quiero eso”, dijo Obama entre risas.
Pero no hay que tener cuidado solamente de nuestros amados perritos, pues nuestros gatitos también pueden ser peligrosos si nos lamen ya que los gatos tienen Pasteurella, que puede ocasionar infecciones en la piel y los ganglios linfáticos.
El texto del profesor Nandi no nos prohíbe darle amor a nuestras mascotas, es todo lo contrario; puedes darle mucho amor a través de mimos y abrazos, pero no permitas que te besen en el rostro.
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