Un pobre perrito sin hogar temblaba de frío en la calle. Acostumbrado a la mirada indiferente de todos los que pasaban a su lado, no se imaginó lo que de pronto le haría una mujer que se le acercó.
El callejerito llevaba mucho tiempo sufriendo las consecuencias de vivir en la intemperie, siendo un perrito completamente desamparado y expuesto a todos los peligros.
Muchas veces no somos conscientes del poder que tiene una palabra, una mirada, una respuesta…
Un sencillo gesto puede convertirse en un modelo de elogio para millones de personas, más aún cuando lo hacemos de una forma genuina y desinteresada.
Duygu Elma, una joven de Zonguldak, Turquía, no pensó que su nombre daría la vuelta al mundo, convirtiéndose en el blanco de los elogios más emotivos, provenientes de personas de muchísimas latitudes.
Todo ocurrió una tarde fría y lluviosa, cuando Duygu salió de una tienda y vio a las puertas del establecimiento a un perrito vagabundo echado en el suelo mojado.
El perrito callejero no dejaba de temblar de frío acurrucado bajo la lluvia
En un gesto instintivo, la joven no dudó en abrir su paraguas, y aunque estaba más que dispuesta a marcharse, se tomó unos segundos para observar al animal en el suelo.
La escena la marcó tanto que se desprendió de su propia bufanda para hacer con ella una manta, y cubrir al pobre perrito.
Al sentir la bufanda, el perro alzó un poco la cabecita, como si no creyera en absoluto que alguien fuera amable con él.
Ella lo cobijó con mucho amor, y las personas que estaban por los alrededores en ese momento, no pudieron evitar notar el noble gesto de la joven, reparando en el perro en el suelo, cubierto con la bufanda a cuadros que minutos antes llevaba Duygu para protegerse del frío.
El acto solidario conmovió no solamente a los presentes, sino a miles de personas en las redes que han expresado su admiración hacia la mujer que se sensibilizó con la dramática situación del perrito.
«La humanidad no está muerta «, anunció un medio junto al vídeo del emotivo momento:
Inicialmente, Duygu pensó que su buena acción sería un bonito gesto anónimo que nadie notaría, en especial porque ella lo hizo sin la más mínima intención de llamar la atención de otros, pero estaba muy equivocada.
La escena de su gesto quitándose su bufanda para abrigar al perro, fue captada por la cámara de seguridad externa del local.
Los encargados de revisar las grabaciones quedaron tan conmovidos que decidieron compartir el noble gesto en las redes sociales, sin imaginar que en segundos se convertiría en un fenómeno viral.
Nadie sabía quién estaba detrás de esta acción, hasta que sorpresivamente una persona reconoció a la joven en el vídeo, mencionando que era su amiga. Así fue como finalmente lograron identificarla.
Hoy en día la propia Duygu no puede creer que el vídeo haya causado tanto revuelo y que miles de personas, como las que se enteraron de su historia a través de Zoorprendente, la hayan contactado para agradecerle por su buen corazón.
«El clima era muy frío. Simplemente no podía soportarlo cuando lo vi temblando», enfatizó esta alma bondadosa.
Ella asegura que solo hizo lo que su corazón le dictó que era lo correcto en ese momento
Confiesa que le preocupó el bienestar del perro, y brindarle un poco de calor con su propia bufanda era lo único que podía hacer por él en ese instante, así que: ¿Por qué negarse a este sencillo gesto?
A Duygu le hace feliz saber que su gesto ha inspirado a otros a sensibilizarse con el dolor de los animales que sufren en la calle. Espera que todos sean capaces de hacer la diferencia y poner un granito de arena a favor de estos seres tan vulnerables.