Todos los perros merecen ser amados hasta su último suspiro, sin importar su condición ellos necesitan amor y protección. Lamentablemente, a veces son dejados a su suerte, les niegan la oportunidad de tener la calidez de un hogar incluso cuando son más vulnerables, están enfermos, mayores o padecen una condición especial.
Coco es un perrito sumamente amoroso y leal al que la vida le hizo una mala pasada: la mascota fue diagnosticada con cáncer, enfermedad que por desgracia se hace visible debido a un enorme tumor en su cabeza.
Ya que los daños de Coco se encuentran en el cerebro, parte de su cabecita está deformada y esto ha significado un problema para el perro, que no ha podido permanecer junto a una familia estable.
El perro fue rechazado por su delicada condición de salud
Cuatro familias han decidido adoptarlo en los últimos meses, pero el perro siempre es devuelto al refugio.
Al parecer estas personas tenían en mente que sería mucho mejor adoptar a un perro joven y sano, con el cual pasar varios años felices.
Lo que no saben es que justamente en las últimas etapas de vida es cuando este perrito necesita más amor y es capaz de retribuirles con la amistad más leal del mundo.
Es cruel la idea de preferir a perros con ciertas condiciones por encima de otros, que de igual modo necesitan amor, atenciones y la posibilidad de estar en un hogar cálido, donde puedan recibir el afecto de las personas.
Luciano Karosas pensó exactamente de esta manera, así que cuando el joven argentino vio en Twitter la publicación en la que se aseguraba que Coco estaba a la espera de un buen hogar, no dudó ni un momento en adoptarlo.
Una vez con el cuidado de Coco bajo su responsabilidad, Luciano le cambió el nombre y decidió bautizarlo Thanos.
Además, lo llevó a un amigo veterinario que trabaja con células madre, a la espera de que la salud del perro tuviera alguna esperanza. Estaba decidido a hacer lo posible por mejorar la calidad de vida del perro enfermo y a ofrecerle su amor hasta que llegara su hora de partir.
Chanchulo es el otro perro consentido de Luciano.
Por desgracia, la enfermedad de Thanos estaba tan avanzada, que los tiempos no eran los indicados para que un tratamiento de este tipo pudiese rendir buenos resultados.
Luciano tuvo que conformarse con la idea de que pronto su nueva mascota estaría fuera de su vida.
Thanos estaba sentenciado. En 41 días, aproximadamente, el perrito dejaría de vivir, pero Luciano no estaba dispuesto a que abandonara este mundo sin antes experimentar todo el amor que una mascota como él, merece.
Luciano y Thanos tienen ya un mes de convivencia.
A través de su cuenta de Instagram, Luciano ha estado documentando cómo ha sido su vida, compartiendo con un perro de estas condiciones.
También ha dejado bien claro a los usuarios, que nada lo hará desistir de su idea de amar a su mascota hasta su último aliento de vida.
Luciano asegura que Thanos es el perro más amoroso que ha tenido.
Es admirable la determinación de este hombre dispuesto a ofrecerle toda la felicidad posible a su mascota en la última etapa de su vida.
Ojalá que haya más personas como él en el mundo, que valoren la vida de los perros y sepan amarlos incondicionalmente, así como ellos lo hacen con nosotros. Tenemos mucho qué aprender de los animales, a ser nobles y leales.
Celebramos que Thanos finalmente estará rodeado de cariño, de protección y amor después de haberse enfrentado a momentos tan difíciles.
Y aplaudimos el gesto de este noble joven que sin dudarlo hizo lo que pocos se atrevieron para regalarle al perrito la oportunidad de sentirse querido.