Al contrario de la falsa creencia que ubica a los perros de raza pitbull como una peligrosa amenaza para el hombre, su carácter dulce y protector les hace merecedores durante más de cien años de la confianza plena de muchos humanos, que dejan a su cuidado y sin más vigilancia, a sus hijos pequeños.
Lamentablemente, la injusta fama de pandilleros y criminales los llevó de ser héroes y niñeras a la estigmatización. Peor aún si el animal está en situación de calle, ya que algunos gobiernos los colocan en la mira y los encarcelan injustamente para “deshacerse” de un problema imaginario. Algo que nos llena de profunda indignación.
En Oaxaca, al centro de México, las autoridades sanitarias no se lo pensaron dos veces para poner tras las rejas a un cachorro de raza pitbull que encontraron deambulando en las calles, según ellos, para prevenir un posible daño que este animal pudiera producir a algún transeúnte.
Por fortuna, el caso del inocente acusado se expandió como la pólvora por todas las plataformas y redes sociales donde cientos de usuarios rechazaron la actitud gubernamental, y a través de varias denuncias hechas por grupos en defensa de los animales, el perrito recibió una segunda oportunidad de una vida digna.
La Red de Animalistas de Oaxaca fue la primera de estas organizaciones que alzó la voz a través de sus cuentas, denunciando la ignominia a la que había sometido este ser inocente, sentenciado a muerte por la ignorancia de algunos.
¿Qué daño puede hacer con esa mirada tan dulce?
“En esta comunidad el que tenga a más de un perro, aunque tengan dueño y estén en su casa, los envenenan al igual que los de la calle, porque ahí exigen que solamente tengan un perro. Al dueño del can le han exigido que lo saque para que lo maten porque es un perro pitbull y, por lo tanto, una raza ‘peligrosa’”, escibieron.
Y es que, no importa si en verdad existen o no casos de pitbulls agresivos causando tremendas heridas, o incluso la muerte a algunas personas, esto no es, en ningún caso una excusa válida para atentar contra la vida de una manera tan brutal. Siempre habrá excepciones a toda regla y no todos los miembros de esta raza atacan a las personas.
Fue gracias a la presión de los medios, que finalmente, la Red de Animalistas de Oaxaca, tuvo un logro sin precedentes: al perro se le perdonó la vida y fue puesto en libertad. A decir del líder de la organización, los rescatistas y otras personas preocupadas por darles una mano muchas veces se enfrentan a más problemas de los que son capaces de manejar.
“No hizo nada, solo que estas personas odian a los perros. Envenenan a los perritos que deambulan en las calles y hasta a los de las casas. Gracias a la presión social ya liberaron al perrito, Gracias a todos”, comentó.
No solo se trata de escasez de personal y de recursos, sino de la indiferencia de las autoridades que muchas veces solo buscan la solución más sencilla para quitarse un supuesto problema de encima.
La realidad de los perros en situación extrema de calle es una muy dura de sobrellevar. Estos animales olvidados deben pasar por cientos de situaciones humillantes e indignas, casi todas con un mismo autor material: el hombre.
No esperemos más, aprendamos de una vez y para siempre la lección de esta exitosa campaña. Respetemos la vida y la integridad de todos los animales por igual. Difunde y levanta la voz por ellos.