Los perritos de la calle están expuestos a un sinfín de peligros, por suerte, existen muchas fundaciones y rescatistas dedicados a ayudarlos.
Sin embargo, hay ocasiones en donde todo sucede muy rápido y los perritos necesitan ayuda inmediata para salvar sus vidas. En estas situaciones salen a relucir los héroes anónimos de nuestra sociedad.
Un grupo de amigos se encontraban caminando por un canal en la ciudad de Almaty, Kazajistán, cuando vieron a un perrito en peligro. El perro había caído a un profundo canal y por mucho que intentaba salir no contaba con las fuerzas suficientes.
De inmediato, los jóvenes llamaron a los rescatistas pero comenzaron a sospechar que quizás no había tiempo suficiente para esperar a que llegaran. El perrito estaba siendo empujado por la corriente y los chicos se dieron cuenta de que estaba a tan sólo unos centímetros de caer en un peligroso vertedero.
No había tiempo que perder así que uno de ellos se lanzó al canal para salvar al perro. El joven lo tomó en sus brazos y se dispuso a subir.
Lamentablemente, el canal era tan inclinado que no podía subirlo de regreso. El perro estaba agotado después de luchar tanto tiempo contra la corriente y tampoco contaba con las fuerzas suficientes para subir.
La situación era verdaderamente tensa, pero afortunadamente sus amigos y otras personas que se encontraban por allí estaban dispuestas a ayudarlo.
“No importa el tamaño, si es un ser vivo merece toda la ayuda del mundo”, comentó un internauta.
Después de mucho pensarlo decidieron formar una cadena humana para tomar al joven y al perrito. Todos estaban muy nerviosos pero sabían que no podían perder más tiempo.
Finalmente, un chico aseguró su cuerpo a la baranda del canal y los demás comenzaron a formar la cadena para acercarse hasta el perrito y su salvador.
“Muchas gracias. Son unos héroes por salvar a ese perrito. Pocas personas se habrían atrevido a algo tan peligroso”, los celebró un usuario en las redes.
Realizaron varios intentos y finalmente lo lograron. El chico utilizó una de sus manos para tomar la de uno de sus amigos y con la otra empujaba al perrito para asegurarse de que no se quedase atrás. Marjana Khadreeva era una mujer que estaba pasando por el otro lado del canal.
Cuando vio el enorme esfuerzo que todos hacían para ayudar al perrito supo que tenía que grabarlo. Fue un verdadero alivio comprobar que el peludo y todos los que le ayudaron resultaron ilesos.
Si te encuentras a un perrito en apuros no dudes en ayudarlo o al menos llamar a un grupo de rescatistas. ¡Comparte!