Extraviar a tu mascota debe ser algo difícil. El sentimiento de perder algo que realmente quieres, no es nada fácil de asimilar, pero después de un tiempo aceptas el hecho y decides continuar.
Pero imagínate que después de un largo tiempo de haber perdido a tu preciada mascota, que la hayas dado hasta por muerta, sin ninguna explicación, un día recibes noticias diciendo que lo han enontrado. ¡Es para no creerlo!
Perry Martin, un hombre de 60 años, oficial jubilado del departamento de Policía de Fort Pierce, Florida, adoptó en el 2002 un hermoso gatito atigrado color naranja, que llegó hasta la puerta de su casa. Al felino lo nombró Thomas Junior, pero también lo llama T2.
El felino y Martin formaron una gran amistad que era amor puro.
En el 2004, debido al huracán Jean que azotó la Costa del Tesoro de Florida, la zona quedó sin electricidad. Perry, a causa de ello, abría sus ventanas para obtener un poco de iluminación y aire en su vivienda.
Un día, el pequeño felino escapó por una de las ventanillas. Martin lo estuvo buscando por un largo tiempo, pero después de un extenso recorrido, no pudo dar con él.
«Estuve buscando por todas partes, pero él realmente se había ido. Fue un momento muy triste, realmente lo extrañé”, comentó Perry.
Después de lo sucedido, llegaron a la conclusión de que T2 había sido atropellado por un automóvil en alguna de las calles transitadas de su vecindario. Pero, ¡una gran sorpresa la obtuvo 14 años después!
Recibió la llamada de un empleado de la oficina de su veterinario, diciéndole: “¿Qué pensarías si te dijera que T2 está vivo?”
«Lo primero que le dije fue: Probablemente te diría que estás loco, T2 murió hace mucho tiempo. Estaba muy sorprendido”, expresó Martin.
Una mujer junto a sus dos hijos, habían encontrado en la calle al felino y lo llevaron a su casa, pero como el gato no encajaba con el perro de la familia, decidieron llevarlo al veterinario. Llamaron a control de animales y de allí a la Sociedad Humana de la Costa del Tesoro, donde fue localizado Martin, gracias al microchip que tenía T2.
Después de una hermosa reunión, T2 fue a casa de Martin, dónde encontró a un nuevo integrante de la familia, Sassy, el perro de Perry. El felino, desde que llegó a su antiguo hogar, fue tratado como todo un rey.
Debido a que T2 estuvo viviendo durante un largo tiempo en las calles, se encontraba en un mal estado. El felino tenía un ojo infectado, estaba muy delgado, su piel estaba infectada de pulgas, se le hacía difícil caminar, así que prefería pasar el tiempo durmiendo acurrucado a Martin.
Perry, al llevar a T2 con el veterinario, no obtuvo muy buenas noticias. El gato presentaba una parálisis de las caderas hacia abajo y ninguno de sus riñones estaba funcionando.
«El veterinario me recomendó que le practicáramos una eutanasia, ya que T2 estaba sufriendo mucho por el dolor. Fue realmente difícil escuchar eso, pero sabía que era la mejor opción”, expresó el dueño de T2.
Fue una dura decisión para Martin, un día recibe la llamada del regreso de T2, y ahora debía despedirse de su pequeño felino con el que solo pudo compartir dos semanas.
«No quería estar en el momento que el veterinario realizara todo el procedimiento, así que antes de entregarle al veterinario a T2, le dije que Hope, Igor y Jazz, mis otros perros de patrulla, se encontrarían con él al otro lado. Estuve llorando todo el camino a casa, ojalá hubiéramos tenido más tiempo”, expresó Martin Perry.
A pesar de todo, Martin está agradecido por haber tenido la oportunidad de reencontrarse y disfrutar de T2 en sus últimos momentos, una oportunidad que no tiene cualquiera. Pudo despedirse de su adorada mascota, después de un largo tiempo sin estar con él.
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