Después de un largo viaje en automóvil, Melanie Whitehead y su esposo Lyndon Smith llegaron a su casa en el Sur de Francia y habilitaron una piscina para sus tres perros, así se aliviarían del insoportable calor que hacía. El más joven de ellos tenía dos años y se llamaba Grub, este adorable Jack Russell se comportó como siempre, inquieto y divertido, jugaba con el tubo de la manguera y entraba y salía del agua.
Media hora después, el perro se tambaleaba de un lado a otro, como un anciano, hasta que empezó a vomitar litros de agua. Enseguida la pareja llevó a Grub al veterinario, pero lamentablemente era demasiado tarde, ya que el animal entró en coma y murió por daños cerebrales causados por tomar gran cantidad de agua en muy poco tiempo.
Después de la terrible pérdida que sufrieron, Melanie y Lyndon se han propuesto crear conciencia en el mundo acerca de los peligros de la intoxicación por tomar agua tan rápido y en tanta cantidad. Antes de que este problema se lleve más vidas inocentes en el calor del verano.
«Apenas llegamos a casa, Grub estaba como siempre saltando por todas partes y acercándose a la manguera para pedir agua, entonces Lyndon decidió sacar la piscina al jardín», contó Melanie. «Cuando puso la piscina con la manguera, los perros empezaron a entrar y salir, jugando… Hacemos esto siempre que llegamos, para Grub era algo normal. No nos dimos cuenta de cuánta agua estaba bebiendo en ese momento«.
«La piscina no había terminado de llenarse cuando Lyndon les dijo que era suficiente y guardó la manguera. Grub en ese momento lo miró con su cara de ‘vamos, papá, juguemos un poco más’, pero después de unos minutos andaba de un lado a otro y no se veía bien. Había algo diferente en su cara, parecía un anciano. Vomitó y orinó litros de agua… Lo que pensamos era que estaba algo sobresaltado o acalorado, intentamos calmarlo».
La pareja dejó al perro en el veterinario y en la noche recibieron una llamada con la terrible noticia de que no sobrevivió. No podían creerlo, ¿cómo es que un alegre y saludable perrito puede morir así? Todo pasó muy rápido y era difìcil de asimilar. «No sabía que era posible para los perros tomar más agua de la cuenta, estábamos en shock».
Consumir una cantidad excesiva de agua hizo que la temperatura del cuerpo de Grub bajara mucho, el nivel de sus electrolitos era muy bajo y eso interfirió con el funcionamiento de su cerebro. Melanie jamás había escuchado sobre la intoxicación por agua y ahora está haciendo todo lo que está en sus manos para que la muerte del chico no sea en vano. Le ha advertido a todos los dueños de mascotas que conoce sobre los peligros de las altas temperaturas en verano.
Los otros perros de la pareja, Quercy y Monti, están tan devastados como Melanie y Lyndon con la pérdida de Grub. Son afortunados de estar en familia y tenerse los unos a los otros para superar algo tan doloroso. Ellos dicen que nada podrá remplazarlo y están en lo correcto, es admirable que tengan la misión de informar a las personas que están a su alrededor acerca de la intoxicación por agua.
¡La pérdida de Grub no quedará en vano! Comparte la historia con todos tus conocidos, sobre todo si tienen mascotas.