El nacimiento de un bebé siempre es un momento de alegría y felicidad. Sin embargo, para los animales que viven en cautiverio no siempre es así, debido a que pasan el resto de sus vidas confinados en pequeños espacios en donde apenas pueden moverse.
Tristemente, esto es lo que ha vivido la hermosa panda gigante, llamada Mei Xiang, durante su embarazo. Siendo exhibida como un medio de entrenamiento, grabada durante las 24 horas del día mediante una cámara en el zoo Nacional Smithsoniano; ubicado en Washington D. C., Estados Unidos.
El pasado 21 de agosto, Mei Xiang dio a luz a su hermoso cachorrito, pero lejos de tener un momento de privacidad, fue grabada en todo momento dentro de su pequeña jaula de escasos metros de ancho y con solo paja para cubrirla del frío.
No tuvo privacidad en ese momento tan especial
El nacimiento ocurrió a las 6:35 de la tarde. Mei Xiang emitió diversos chillidos que alertaban sobre el nacimiento, recogió al cachorro de inmediato, comenzó a acunarlo y cuidarlo; siendo evidente desde el primer momento el gran amor que siente hacia él.
El equipo de cuidadores de pandas del lugar sigue monitoreando a Mei Xiang y su cachorro a través de las cámaras del zoo. Le realizarán un examen neonatal cuando puedan acercarse a él, lo cual puede demorar algunos días.
El tamaño de su jaula es indignante
«Los pandas gigantes son un símbolo internacional de la vida silvestre en peligro de extinción. Con el nacimiento de este precioso cachorro estamos encantados de ofrecer al mundo un momento de alegría muy necesario.
Dado que Mei Xiang tiene una edad materna avanzada, sabíamos que las posibilidades de que tuviera un cachorro eran pocas. Sin embargo, queríamos darle una oportunidad más para contribuir a la supervivencia de su especie”, dijo Steve Monfort del Instituto.
Mei Xiang ha dado a luz a tres cachorros: Tai Shan, Bao Bao y Bei Bei. Tai Shan nació el 9 de julio de 2005 y se mudó a China en febrero de 2010. Bao Bao nació el 23 de agosto de 2013 y se mudó a China en febrero de 2017, mientras que Bei Bei nació el 22 de agosto de 2015 y se mudó a China en noviembre de 2019.
Como parte del acuerdo de cría cooperativo del zoo con la Asociación de Conservación de la Vida Silvestre de China, todos los cachorros nacidos se mudan a China cuando tienen 4 años. El actual acuerdo cooperativo de cría del zoológico expira en diciembre de 2020 por lo que no se sabe con certeza cuál será el destino final de este nuevo bebé.
El nacimiento de este pandita es milagroso, dado que las pandas gigantes solo pueden quedar embarazadas durante 24 a 72 horas cada año, por lo que el momento es digno de celebración. Pero lo que es realmente indignante y lamentable es que no puedan reproducirse en su hábitat natural disfrutando de sus derechos, especialmente de la libertad.
Sin embargo, confiamos en que el destino de este pequeño sea mucho mejor al de compartir una jaula altamente estrecha junto a su madre.
Merece una vida digna
Mei Xiang merece mucho más que vivir recluida en su prisión de cuatro frías paredes de hierro. Es un ser vivo cuya vida va más allá de lo que logran capturar las cámaras que siempre la acechan.
No dejemos de luchar porque tenga una mejor vida.
Alza tu voz a favor de los derechos de los animales, ninguno debería ser víctima de malos tratos ni ver cómo sus derechos son vulnerados por la cruel industria de los zoológicos, parques y circos. Comparte esta noticia.