El destino de miles de koalas ante los recientes incendios forestales que han azotado el vasto territorio australiano, está siendo desgarrador. Especialmente porque su mayor fuente de alimento, el eucalipto, ha sido arrasado casi en su totalidad, y porque a diferencia de los canguros, para ellos escapar del fuego, puede resultar una verdadera odisea.
El mundo entero clama que las llamas cesen y estos preciosos animales hallen finalmente la paz y el sosiego que merecen, y puedan vivir en un entorno libre de amenazas, en su mayoría causadas por el ser humano.
Sin embargo, en medio del trágico panorama no es poco común que algunos ciudadanos afortunados sean testigos de las más tiernas escenas, como un regalo inmerecido de la naturaleza. Y depende de nosotros saber cómo actuar en ese momento, convirtiéndonos en ángeles para esas almas necesitadas.
Fue precisamente la fortuna de una reconocida periodista de la cadena ABC, en Capricornia, Karyn Wilson, cerca de Navidad. Ella iba a pasar unos días con sus familiares en Tamborine Mountain, una hermosa meseta al interior del famoso Goald Coast Hinterland.
Tamborine Mountain es el primer Parque Nacional de Queensland y un escondite secreto para los australianos
Es habitual encontrar zarigüeyas, bandicoots, koalas y wallabies, recorriendo el terrirorio «a sus anchas», sin que nada los perturbe.
Fue entonces cuando Karyn no dudó en sacar la cámara para grabar el mágico momento. Se trataba de un pequeño y curioso joey paseando sobre el lomo de su madre.
«Esto es lo más cerca que he estado de uno en la naturaleza, no parecía tener miedo de nosotros», escribió Karyn.
El emotivo video acumula 5 millones de reproducciones y es indudablemente lo más tierno de contemplar:
This koala joey was spotted hitching a ride with mum at Tamborine Mountain on the Gold Coast yesterday. ?ABC Capricornia journalist Karyn Wilson was visiting relatives for Christmas and couldn't believe her eyes."This is the closest I have ever gotten to one in the wild, she didn't seem scared of us," she said.They offered the pair water but they continued on their way.
Publiée par ABC Hobart sur Dimanche 22 décembre 2019
Se puede ver cómo la ejemplar madre carga sobre las espaldas al pequeño para iniciarlo en la aventura de explorar el mundo, y enseñarle sobre los posibles peligros de la vida.
«Era como si después de todo lo vivido, hubiera encontrado la mejor forma de calmarlo y asegurarle que mientras esté junto a mamá ya nada malo le puede pasar… ¡Nunca más!», comentó Karin.
Nada más seguro y divertido que ir sobre los hombros de mamá
Incluso la intrépida madre salta un importante muro con el pequeñín a cuestas convencida de que todo lo puede
Y si bien puede ser algo que asuste al chiquitín, él ni se inmuta en lo más mínimo.
Hasta los siete meses los koalas bebés permanecen dentro de la bolsa de su madre
Es demasiado adorable ver al pequeñito con los ojos abiertos atento a todo lo que pasa a su alrededor. Pero claramente es una escena que al mismo tiempo entristece, ya que probablemente estén buscando alimento, algo que no será muy fácil para el par.
Una vez que la crías salen de la bolsa, se montan en su espalda para explorar el mundo que les rodea.
En ese momento, su estómago ya está preparado para procesar las hojas de eucalipto y han madurado lo suficiente como para abandonar el cuidado materno y buscar su propio hogar. Lo normal es que la madre tenga otro retoño que sacar adelante justo entonces, pero si no es así, el joven podrá permanecer más tiempo a su lado.
Karyn relató que después del dulce encuentro que tuvo con los marsupiales, les dio de beber agua. Pero enseguida siguieron su camino, dejando en su corazón estas inigualables imágenes que las guardará por siempre.
No te vayas sin compartir esta tierna historia que calienta el alma a cualquiera. Es realmente confortante ver a estos animales libres en su propio entorno. Ojalá que pronto el resto de animales puedan disfrutar del Planeta que el ser humano les ha arrebatado.