Los animales abandonados en la calle corren muchísimos peligros; además de tener que sobrevivir y alimentarse por su propia cuenta, deben convivir con autos y peligros en la calle. Y no solo eso, sino que también deben lidiar con enfermedades que ellos no pueden tratar.
Un hombre residente del sudeste de Florida notó un día que un gato se encontraba comiendo el alimento de su mascota; para él esto no era nada sorprendente, pues a pesar de que no hubiera muchos animales callejeros en el área, tener un visitante así era algo de esperarse.
Cuando el hombre se acercó al animal, se percató que el gato comía desesperadamente, como si se estuviera muriendo de hambre, esto lo hizo sentir alarmado y preocupado por la salud del minino.
Al observarlo más de cerca, notó que tenía mucha sarna alrededor de todo su cuerpo, esta enfermedad de la piel incluso atacaba los ojos del animal, la infección en esta área era increíble y se veía completamente dolorosa.
El hombre debía hacer algo para ayudar al animal por lo que, con ayuda de la comida, lo atrapó para intentar cuidarlo; sin embargo, él sabía que iba a necesitar ayuda por lo que publicó en su cuenta de Facebook la historia del gato que encontró y pidió ayuda para el pobre animal.
Para fortuna del minino enfermo, una de las amigas de Facebook del hombre era fundadora de Animal Friends Project, se trataba de Carmen Morales Weinberg. Al ver la noticia, la mujer se puso en contacto de inmediato con este hombre para ayudar en la recuperación del minino.
Cuando Carmen tuvo al gato, lo llevó rápidamente al veterinario para su recuperación. Al ser examinado, se detectó que el gato estaba desnutrido y deshidrato, la sarna en su piel era muy grave sobre todo en el área de los ojos, el debía recibir tratamiento lo más rápido posible, ¡qué bueno que fue llevado a tiempo al veterinario!
El gatito sabía que estaba en buenas manos y nunca se mostró asustado, entró en confianza rápidamente y pronto se enamoró de Carmen, el minino sabía que la mujer cuidaría de él y se encargaría de su recuperación.
Carmen lo llevó a casa con ella para asegurarse de que se recuperara muy rápido, lo nombró Cotton (Algodón). El felino poco a poco fue ganando peso y recuperándose; conforme la enfermedad en su piel y ojos pasaba, Carmen descubría el hermoso gato que tenía en casa con ella.
La recuperación del minino fue increíble, Carmen jamás había imaginado la hermosa sorpresa que se encontraba debajo de la enfermedad en sus ojos.
Cotton tiene los ojos más bellos del mundo, tiene uno azul y otro amarillo, es muy feliz y se encuentra muy bien.
Es increíble cómo podemos hallar sorpresas en los lugares más insospechados y la historia de este minino nos recuerda lo importante que es ayudar a los demás; todos merecemos una segunda oportunidad de vida.
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