Los animales nos han demostrado que su amor y gratitud van más allá de la vida, ellos nos entregan cada día lo mejor de su corazón y ese sentimiento prevalece por sobre todas las cosas, hasta el último suspiro.
Un gatito llamado Tom estuvo en el último momento de vida de un veterano de guerra para darle la paz que necesitaba, extendió su patita y la puso sobre la mano del paciente para hacerle saber que estaría con él, no se puede describir con palabras cuando se tiene que enfrentar tan difícil momento de la muerte y decir adiós para siempre.
Cuando uno de los médicos se volteó hacia Tom para darle la triste noticia del fallecimiento de este paciente en el hospital, él respondió de la única forma que sabía “Tom me miró y maulló”, recordó el Dr. Blake Lipscomb.
“Tom conoció bien a este paciente, había estado con el veterano y su familia en los momentos más difíciles para ellos haciendo exactamente lo que quería, transmitir serenidad y calor de hogar”, explicó Lipscomb.
La muerte causa un dolor muy profundo, estar al lado de un ser que poco a poco se va desvaneciendo es desconsolador, tener a alguien que nos brinde sosiego cuando no sabemos qué hacer y se busca una respuesta para sobrellevar la tristeza fue lo que hizo este gato rescatado de un refugio, es el cuidador oficial en el Centro Médico «Salem VA Medical Center» en Virginia, Estados Unidos, donde los veteranos reciben atención médica y cuidados paliativos para pacientes terminales.
Hay una razón especialmente importante para la permanencia de Tom en el centro médico, a él le gusta y es muy bueno llevando esa calidez hogareña, sabe iluminar cada rincón con su compañía y hace sentir mejor a las personas que están bajo el estrés de tan dolorosa situación.
«Puede pasar horas con un paciente o simplemente pasear por el pasillo y con agilidad pasar de habitación en habitación y visitar a muchos. Se ha convertido en un miembro muy importante del equipo de atención de salud y sin duda sabe su papel como cuidador reconfortante», expresa Benois de Shelby, portavoz del hospital,
“Tom percibe cuando alguien requiere un poco de comodidad, a veces es el paciente que más lo necesita, en otras ocasiones puede ser un miembro de la familia” añadió.
Es un gato que en lugar de querer llamar la atención con mimos, fotos o jugar con el personal del hospital, prefiere buscar entre quienes lo necesitan y acurrucarse junto a un paciente para ofrecerles comodidad.
Es un ejemplo más que demuestra en acciones naturales como las mascotas tratan de conectar con los seres humanos justo en el momento correcto.
Tom al darse cuenta que el veterano del ejército estaba muriendo saltó sobre la cama, enseguida apoyó su patita sobre la mano extendida de este hombre, “fue un hermoso paso” dijo Elizabeth Gehlert. «Y ese gato es el que lo hizo posible».
El mejor consuelo para vivir este duelo es la fortaleza espiritual que nos da el amor, sostener una mano que nos acompaña puede ser el único remedio que sin palabras llena de paz el alma, hacerle saber que de alguna forma se tendrán el uno al otro pase lo que pase.
Te invitamos a compartir esta historia con una palabra de aliento para el corazón.