Los rescatistas de Jin’s Bottle Babies han salvado la vida de muchos gatitos en los últimos años, pero nunca se habían topado con un par de felinos que guardaran una relación tan especial como Jones y Shiro. Shelbi Uyehara recibió la llamada sobre los pequeños.
Los dos gatitos fueron hallados en un basurero.
Alguien había visto un par de gatitos recién nacidos en la calle y se veía que necesitaban mucha ayuda. De inmediato, un equipo se dirigió hasta allí para proteger a los pequeños del frío.
“Pensé que necesitarían demasiados cuidados y que tardarían en recuperarse pero fue todo lo contrario”, dijo uno de los rescatistas.
La noche anterior había tenido lugar una gran tormenta y estos pobres gatitos pasaron horas enteras tratando de resguardarse del frío. Eran tan pequeños que todavía no habían abierto sus ojos, pero se acurrucaban el uno contra el otro para brindarse calor.
Los gatitos fueron rescatados en la ciudad de Phoenix en los Estados Unidos.
A tan corta edad, necesitaban con urgencia de los cuidados de su madre para poder crecer sanos y salvos. Los rescatistas los llevaron a una pequeña incubadora para ayudarlos a regular su temperatura.
“Eran mínimos pero tenían mucha energía. Intentaban trepar por las paredes y curioseaban todo a su alrededor”, explicó Shelbi.
Con el paso de los días, estos hermosos gatitos demostraron que estaban dispuestos a crecer sanos y salvos. Eran sumamente cariñosos y pasaron días enteros abrazándose. No había dudas de que tenían un nexo verdaderamente especial después de haber nacido en las calles y haber sobrevivido a circunstancias tan devastadoras.
Para los rescatistas era difícil darles cuidados veterinarios ya que se negaban a separarse.
Un par de semanas después estos hermosos hermanitos ya lograban caminar y comenzaron a tener todo tipo de aventuras. Incluso a la hora de explorar por el refugio, lo hacían lado a lado. Shiro es el más pequeño y siempre busca la protección de su hermano. Jones es mucho más travieso y está bastante seguro de que todos los objetos del mundo son sus juguetes.
“Jones va por toda la habitación como si persiguiera un ratón imaginario. Adora que le den mimos y que lo alcen como a un bebé”, explicó Shelbi.
Estaba claro que merecían ser adoptados juntos. Separarlos después de todo lo que habían pasado, podía dejarlos sumamente tristes e incluso afectar su estado de salud. Afortunadamente, una familia escuchó la historia de los gatitos y quedaron enamorados de ellos. Ahora cuentan con un hogar en donde nunca les faltará nada y podrán realizar un sinfín de travesuras.
Una simple llamada logró que estos gatitos recibieran ayuda y encontraran la familia amorosa que tanto merecían. Nunca dudes en ayudar a un animalito en las calles. ¡Comparte!