Es bien sabido que los animalitos muchas veces ofrecen mejor consuelo y compañía que las personas, ellos parecieran saber el momento exacto en que más necesitamos de un gesto de amor y llegan para aliviar nuestras cargas y hacernos saber a su manera que todo estará bien.
Al menos eso fue lo que recientemente experimentó un enfermero en formación cuando en su hora de descanso tuvo la oportunidad de compartir con una adorable gatita que hizo que todos los problemas desaparecieran con solo acostarse en su regazo por unos minutos.
Los peluditos ofrecen su amor incondicional incluso a aquellos con quien nunca antes han tenido algún trato.
Sabemos que los últimos meses el personal de salud ha estado al frente de la batalla para combatir el Covid-19, por lo que descansar se ha vuelto un privilegio, ya que siempre están entre la sala de emergencia o frente a un paciente tratando de estabilizarlo.
Sin embargo, cuando tienen sus preciados minutos de descanso difícilmente se pueden desconectar de una realidad que nos carcome a nivel mundial.
Flaty está cursando en último año de pasantía en Enfermería.
Pero esta vez, Ahmed Flaty, quien está realizando sus pasantías como enfermero en el hospital de Egipto, logró aliviar sus cargas cuando en su hora de descanso apareció de la nada una gatita callejera para consolarlo.
Al respecto Flaty comenta:
“Estaba sentado para hablar con un amigo mío frente al hospital donde tenemos nuestro año de pasantía y mientras hablaba con él, esta pequeña gatita se acercó a mí. Ella no maulló ni nada, solo me miró, luego se subió a mi regazo me miró un poco y luego se durmió.”
Flaty no podía creer que la dulce gatita se acercara para consolarlo, destaca que los perritos o gatitos callejeros por lo general reciben malos tratos en Egipto, así que ver a una gatita acercarse a él sin recibir nada a cambio le parecía aún más extraño.
El enfermero dejó de lado su asombro y decidió responder a las caricias de la tierna gatita quien rápidamente se quedó dormida en su regazo mientras la acurrucaba. A través de su cuenta de Instagram publicó una foto en la que se lee:
«Qué mayor regalo que el amor de un gato», Charles Dickens.
Flaty comenta que el contacto con la gatita hizo que se sintiera mucho mejor.
“Había estado en el turno de 12 horas continuamente durante 20 días seguidos, pero esa gata hizo que todo esto pareciera nada. Honestamente, fue el mejor momento de todo este año hasta ahora», agregó.
Al joven enfermero le encantaría adoptar a un perrito o gato pero debido a su profesión no puede darle toda la atención que una mascota merece.
Ahora en cada descanso aprovecha para buscarla, pero desde aquel tierno momento no ha visto más a la adorable peludita.
Los peluditos son esos ángeles terrenales que están para hacernos saber que todo estará bien. Quizá esta gatita sólo quería manifestar su amor a alguien que ha dado tanto a su país en estos momentos tan difíciles. ¡Comparte!