Rosie es una de esas criaturas de este mundo con un corazón grande y agradecido. Pese a que algunos catalogan a su especie como traicionera, la historia de esta gatita callejera le demuestra a todos que jamás se debe generalizar.
Si algunos felinos son un poquito rebeldes o malagradecidos, esto no pasa con ella.
Hace casi dos meses que Rosie apareció en un barrio de la ciudad de Moreno Valley, en California (Estados Unidos). La minina se encontraba hambrienta y deshidratada, casi sin fuerzas debido al sol inclemente que ha acechado al estado en este verano, así que decidió meterse al jardín trasero de una residencia.
Buscó el mejor refugio para descansar.
Por fortuna, fue a parar en manos amorosas; los dueños de la casa la alimentaron y acicalaron lo suficiente hasta que pudo recobrar sus fuerzas.
Rosie estuvo hospedada en el lugar por un par de días pero desapareció una noche del mismo modo misterioso como había llegado, sin hacer ruido ni dejar rastro.
Rosie fue alimentada y protegida por una buena familia.
La familia quedó un poco desconcertada por la partida de Rosie y aunque la buscaron por los alrededores no pudieron hallarla, creyeron que se había marchado para siempre.
No obstante, este grupo familiar recibió la sorpresa de su vida cuando vieron a Rosie llegar semanas después a casa, pero además, no estaba sola.
Rosie se había vuelto mamá.
La gata apareció con sus gatitos en la residencia de la familia que la había ayudado semanas antes.
Esta situación conmovió a los propietarios quienes entendieron perfectamente que la felina necesitaba ayuda. Por esa razón llamaron a Alley Cat Rescue de Los Angeles, quienes aparecieron en el lugar para apoyar a Rosie y a sus pequeños.
Los voluntarios se encargarían de cuidar a la madre y su cría hasta que estuviesen en condiciones de ser adoptados.
La gatita se dejó atrapar por los rescatistas y con ella sus dos hijitos, Alio y Olio, pero había un tercer gato algo travieso que parecía haber desaparecido.
Los pequeñines de Rosie: Alio y Olio.
Su nombre es Harris y se había escondido en el neumático de un automóvil, un vecino de la familia lo localizó y reportó para que pudiese ir a un refugio junto a su mamita y hermanos.
Este gatito parece ser el más rebelde del grupo y al principio se mostró bastante arisco pero poco a poco comenzó a domesticarse a punta de mismos y cariños.
Conoce al travieso Harris.
La familia está en una casa de acogida temporal en la que Rosie se recupera de un parto y crianza complicada. Esta madre sabía que la familia que la había cuidado sin ningún interés lo volverían a hacer y no sólo por ella sino por sus hijos.
Afortunadamente, sucedió de esta manera y ahora la gatita puede estar tranquila porque sabe que sus pequeños crecerán en buenas manos.
Esta gatita quería lo mejor para sus pequeños y lo encontró, comparte su tierna historia y que sea motivo de inspiración para otros rescatistas.