Una horrorizada mujer se encontró en un campo abierto en Texas una imagen que parecía salida de las peores pesadillas que un amante de los animales se pudiera conseguir.
En un campo abierto y a la intemperie se encontraba un pobre animal abandonado que parecía estar en el mayor agonizante dolor.
El perro se encontraba en un estado crítico de desnutrición y hambre y no se movía para nada. La mujer se apresuró hacia el centro de emergencias veterinarias más cercano.
Pero la respuesta que obtuvo del equipo de veterinarios no era lo que esperaba. Todos allí pensaban que debía de sacar al pobre animal “de su miseria”, sacrificándolo.
Al dejarlo solo en medio de un campo, esta persona lo condenó a una muerte lenta y muy dolorosa.
Ahí fue cuando el equipo de Rescue Dogs NY se involucró. Ellos tomaron al mestizo de pastor de 6 años que había sido abandonado por su dueño.
Stacey Silverstein, co-fundadora de la organización cree que cuando el perro quedó completamente paralizado, su antiguo dueño, en vez de buscar ayuda, decidió abandonarlo.
El equipo de veterinarios pensaban que no había ninguna esperanza para Hugey. Sara comenta que sus indicaciones eran lo más desalentadoras posibles:
“Debes sacrificarlo, me decían, no hay esperanza para él. Está paralizado, ni siquiera puede hacer sus necesidades por sí solo, no lo va a lograr.”
El diagnóstico era aún peor de lo que pensaban: Hugey tenía discoespondilitis, una infección de los discos intervertebrales, que se estaba comiendo su médula espinal.
La infección, de ser tratada a tiempo, no hubiera ocasionado una parálisis de esa magnitud.
Hugey tiene trozos faltantes en su médula y además los exámenes mostraron que también tiene parásitos en el corazón. Una enfermedad que puede ser mortal de no ser tratada a tiempo.
Pero como bien conocemos el compromiso de los chicos de Rescue Dogs NY, ellos no se rinden con ninguno de sus perritos, por más difícil que parezca el reto.
Hugey no podía ser trasladado en esas condiciones, así que pasó las siguientes dos semanas recibiendo tratamiento en el mismo hospital donde querían sacrificarlo.
Finalmente lo transfirieron a una clínica en Long island donde le administraron un costoso tratamiento para poder aliviar su infección.
Pero todo valió la pena al final, la medicina y las sesiones de fisioterapia lograron hacer maravillas por Hugey.
Seis semanas después ¡él nuevamente podía caminar!
Fue un proceso gradual, primero empezó a usar unas ruedas, luego un cabestrillo de apoyo humano y finalmente pudo caminar, correr, saltar, es un milagro.
Además se nota como Hugey también siente su progreso, al inicio del tratamiento Stacey lo veía deprimido y sin esperanzas, él mismo ya se había rendido.
Pero con el paso de las semanas su rostro se iluminaba, su ánimo mejoró, estaba tan feliz y agradecido, es hermoso.
Hugey está en la búsqueda de un hogar permanente y lo mejor es que cualquier tipo de familia funciona para él.
Realmente es un chico maravilloso. Todos lo que lo conocen lo aman: niños, otros perros, gatos. Es muy gentil, educado, le encanta jugar.
Realmente es asombroso todo lo que se puede lograr con amor y perseverancia. ¡Mira como juega!
Publié par Rescue Dogs Rock NYC sur dimanche 25 juin 2017
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