¡Qué suerte tienen algunas mascotas cuando la ayuda llega justo a tiempo! Un gatito de Baldwin Park en California la estaba pasado muy mal, por las circunstancias más lamentables que puedes imaginar.
El gato tenía la cabeza atorada dentro del cartón de un rollo de cinta adhesiva. Nadie sabía si el animal pertenecía a alguien.
Las imágenes de este pobre gatito antes de su rescate son verdaderamente angustiantes
Tampoco había modo de averiguar si el incidente con el rollo de cartón había sido accidental u obra de alguien con malas intenciones. Lo único que sabían los residentes de este vecindario, es que el pobre necesitaba ayuda.
Inmediatamente llamaron al servicio de Control de Animales para ayudar al gatito. Aunque varios vecinos se unieron a la causa, acompañados de expertos en rescate de mascotas, no tuvieron suerte.
Por suerte, lograron atrapar al gato tras numerosos intentos
Solo los voluntarios Kimberly Saxelby y Chris Gattas tomaron el rescate de esta mascota como un reto personal. Lo intentaron una y otra vez, sin éxito. Un día de San Valentín volvieron al vecindario.
Al principio quisieron atrapar al gatito en una jaula, colocando un poco de comida. Era evidente que el minino no caería en la trampa, en especial por el dolor que le producía el objeto en su cuello.
Las lesiones causadas por el cartón eran terribles
Luego, Kimberly y Chris tuvieron mejor suerte con sus redes. Lograron arrinconar al pobre gatito asustado y finamente capturarlo.
Los voluntarios estaban felices, era solo el comienzo para una vida mejor.
El rescate y la recuperación de Valentine es una historia muy especial
De inmediato trasladaron al gato al Refugio de Animales Rancho Cucamonga para que recibiera atención médica. Allí determinaron la gravedad del incidente con el rollo de cartón en su cuello.
El gato había estado luchando con este problema por meses, con lesiones severas en la parte posterior de sus orejas y su cuello. Fue necesario recurrir a la cirugía para poder sanarlo. Los veterinarios ignoraban cuán mal estaba el gatito, pero al menos pusieron manos a la obra para ayudarlo.
Su recuperación fue lenta, pero Valentine estaba dispuesto a lograrlo
Kimberly sintió mucha pena de imaginar todo el sufrimiento del gatito. Estaba demacrado, triste y adolorido. Por meses no pudo comer o beber bien, debido al rollo de cartón que cubría por completo su cuello.
Pero Valentine estaba muy lejos de rendirse. Gracias al día en el que fue rescatado y a su gran valor, los rescatistas decidieron bautizarlo con este nombre. Con satisfacción vieron cómo el gatito se recuperaba rápidamente.
Ahora Valentine es un gato amoroso, agradecido y muy saludable
Valentine aún era un poco tímido con las personas, pero cuando llegó a su hogar de acogida, él comenzó a avanzar de forma positiva. Estar en un hogar tranquilo y amoroso hizo la diferencia para este dulce niño atigrado.
Este hermoso gato no solo se acostumbró con alegría a sus nuevos padres, también a sus compañeros gatunos. La vida le dio una segunda oportunidad a Valentine y él no está dispuesto a desaprovechar un solo segundo para expresar su amor y agradecimiento.
El caso de Valentine nos preocupa e indigna, pero si al igual que nosotros estás feliz de que este noble gatito haya conseguido una segunda oportunidad, comparte su historia en tus redes sociales.