Como es tradición durante las épocas festivas, muchas personas viajan para pasar tiempo con sus familiares. Nada de esto resultaba extraño para los Stevensons de Woodhaven, Michigan, quienes viajaban en su automóvil a Mayville para pasar Navidad en familia, hasta que sufrieron un pequeño inconveniente.
El vehículo en el que iban se coleó en una zona resbaladiza y dio varias vueltas antes de detenerse.
Por fortuna ni Wade ni su esposa Ruth ni su hija Hazel, de cuatro años, resultaron lesionados pero su perrito Red, un Golden Retriever de un año, salió disparado del vehículo en una de las tantas vueltas y se habría perdido en una zona boscosa cercana a la carretera.
“Para ser honesto sólo sufrimos un par de rasguños. Incluso, ni los regalos de Navidad se rayaron. No entiendo qué pasó”, dijo Wade Stevenson.
La familia buscó a Red por largo tiempo, junto al grupo de control animal y la policía de Auburn Hills que acudieron al lugar. Sin embargo, ninguno de ellos había dado con el paradero del Golden.
Días después del incidente, algunos pobladores de la zona del incidente reportaron haber visto a Red en un parque empresarial, cerca de Harmon Road y Atlantic Boulevard.
A pesar de los intentos por atraparlo, el asustado Golden siempre huía de quienes intentaban acercársele.
La familia y las autoridades veían con preocupación el hecho de que Red se encontrará con el tráfico o con la I-75 y tuviese un fin lamentable.
Ante la preocupación, el grupo decidió utilizar tres trampas vivas que no lastimarían al perro para llevarlo a un lugar seguro. En ellas colocaron comida y algunas prendas de la familia para ayudar a la mascota a volver a casa.
Además de esto, Wade llenó sus redes con imágenes del perrito y estas fueron compartidas en los grupos de la comunidad.
Afortunadamente el buen olfato del Golden dio resultado y la estrategia con las trampas fue todo un éxito.
En la víspera de Año Nuevo el director de un refugio, Michael James, halló al Golden dentro de una de las trampas que habían instalado.
Después de ser encontrado, Red fue trasladado a un centro veterinario para examinar su salud. El médico determinó que el perrito había sufrido un esguince en su pata, probablemente debido al impacto recibido al salir del automóvil.
Aunque este amiguito necesitará unos meses para recuperarse, es una gran noticia que haya vuelto a casa.
Su familia está feliz y dedicada a cuidarlo por el tiempo que sea necesario. Wade agradeció a todos aquellos que se involucraron en la búsqueda de Red y ha comentado que lo sucedido
«Ha sido una experiencia emotiva que me unió mucho más a mi familia”.
El desenlace de esta historia nos demuestra que los milagros sí existen. Es una gran fortuna que esa familia haya vivido tan anhelado reencuentro. Compártelo.