Una mascota es un integrante más de la familia, es un ser importante en la vida de sus dueños y todo lo que le pase afecta directamente las emociones y sentimientos de sus seres queridos.
Alan Whitton, de 49 años, es coach, se desmoronó tras encontrar en un agujero a Mitzi, su amada mascota que tenía dos días desaparecida.
Este momento quedó capturado en un vídeo que fue difundido en las redes, realmente son imágenes cargadas de mucha emoción y que han cautivado a miles de usuarios.
Todo sucedió cuando una mañana Alan llevó a Mitzi a dar una vuelta por Knighton Wood y fueron sorprendidos con un perro Basset Hound y Mitzi huyó aterrada hasta desaparecer.
Alan pasó el resto del día buscando frenéticamente a su amada mascota, hasta que finalmente abandonó el área a las 6.30 de la tarde.
Aterrorizado de que Mitzi hubiera sido atrapada y herida, Alan continuó su búsqueda los días siguientes por el bosque sin descansar.
Después de ser obligado a hacer una pausa para comer, recibió la llamada de una mujer que paseaba perros para decirle que su mascota había estado olfateando un agujero de zorro en el bosque. Alan reveló que dejó caer todo y se apresuró para llegar al lugar e investigar.
Tomó uno de los juguetes de Mitzi para hacerlo sonar fuera del hoyo y confirmar si había alguna reacción.
Como respuesta escuchó un leve gemido e inmediatamente comenzó a cavar sin descanso con la ayuda de la mujer que lo había llamado.
Milagrosamente después de 50 horas de haber desaparecido, Alan se reunió de nuevo con su mascota.
Las imágenes muestran cuando Alan saca a su perrita del hoyo y la acurruca contra su pecho como si su alma hubiese regresado a su cuerpo mientras explota en un emotivo llanto.
“Me derrumbé, estaba desbordado de la alegría e incredulidad, había comenzado a perder la esperanza”.
Alan describió este rescate como un «milagro navideño»
«Fue como un milagro de Navidad, todo el tiempo sentí que vivía una pesadilla de la que no podía despertar».
Afortunadamente, Mitzi resultó ilesa, solo fue necesario quitarle algunas garrapatas después de visitar al veterinario.
Alan dijo que lo primero que hizo después de tener a Mitzi en casa fue abrir un paquete de salchichas veganas para celebrar. Agregó que le comprará a Mitzi un collar con GPS para poder rastrearla.
Alan agradeció la solidaridad de los vecinos y ofreció sesiones de entrenamiento gratuitas a quienes hayan participado en el rescate de su amada mascota. Expresó que ellos restauraron su fe en la humanidad.
Alan dice que esta terrible experiencia le ha enseñado a «no dar nada por sentado» y a «amar a lo grande y amar mucho». No dejes de compartir este gran aprendizaje que nos deja este emotivo rescate.