Bo era una linda cachorrita con unas pocas semanas de nacida. Su dueño la llevó al veterinario asegurando que lo mejor sería sacrificarla. Su futuro lucía sumamente oscuro, pero los veterinarios decidieron hacerle un chequeo completo antes de tomar cualquier decisión que pudiera terminar con su vida.
El dueño de la perrita afirmaba que ella había nacido paralítica.
Los médicos sospecharon que el dueño de Bo simplemente quería deshacerse de la perrita y no tomar ninguna responsabilidad en caso de que necesitara algún tratamiento para tener que mejorarse.
En el momento en que trasladaron a Bo hacia otro consultorio para realizarle más exámenes, el dueño salió rápidamente del edificio.
Las pruebas revelaron algo que logró salvar la vida a la linda perrita. Sus niveles de azúcar estaban extremadamente bajos y esta era la razón por la que no podía caminar. No tenía ningún problema en sus patitas, simplemente estaba tan débil que su cuerpo no podía realizar ningún esfuerzo como caminar.
“La única razón por la que Bo tenía síntomas similares a la parálisis era porque estaba demasiado débil para moverse”.
Era algo mucho más sencillo de lidiar, y no había ningún motivo para tener que sacrificar a una perrita que apenas estaba comenzando a vivir. El veterinario la trasladó a Piper Wood y quedó a cargo de Hand in Paw, en California. Allí, los rescatistas comentaron lo sorprendidos que estaban con el caso de Bo.
“Tal vez no la estaban alimentando lo suficiente, y su nivel de azúcar en la sangre era demasiado bajo”.
Decidieron que ellos le darían la atención que no recibió de su irresponsable dueño. Le administraron líquido y en cuestión de poco tiempo logró recuperarse. Era hora de buscarle un nuevo hogar para que pudiera vivir feliz.
Todos los que se acercaban a la perrita notaron que estaba sumamente nerviosa, parecía que le tenía miedo a las personas.
Por suerte, en poco tiempo encontraron un lugar perfecto para para ella, y cuando vieron lo feliz que se puso al conocer a su nueva familia sabían que todo había valido la pena.
“La vi jugar por primera vez con 10 juguetes y corría muy feliz. Ahora se siente mucho mejor y está como en casa”.
Su nueva familia la nombró Bella, y ahora podrá dejar atrás sus primeros días de vida que fueron tan difíciles.
Look at our new baby, Bo! Her former owners brought her in to our vet yesterday. They said she was paralyzed. They stated that they didn't want her, immediately signed her over, refusing any treatment (except euthanasia), and just left! Dr. Z immediately began treatment, and within 10 minutes, this girl was moving around. Today, she is standing and eating on her own! She is only 6 weeks old, but will certainly have a full, wonderful life ahead! ♡
Publiée par Hand in Paw sur Mercredi 10 mai 2017
Levantamos la voz en contra del irresponsable acto de los primeros dueños de esta perrita que pedían sacrificarla sin haber realizado un verdadero chequeo médico. Afortunadamente la linda Bella se topó con personas que supieron cuidarla y amarla.
Te invitamos a compartir esta emotiva historia para celebrar la nueva vida de Bella.