Podemos ver lo que provocó el exceso de comida chatarra y refrescos en este mono salvaje, que ha sido rescatado por funcionarios de vida silvestre para ayudarlo con su problema de obesidad morbida. Ahora tendrá que cumplir una dieta estricta hasta que recupere su peso ideal.
Este mono apodado «Uncle Fatty» o «Tío Gordo», vive en las inmediaciones del mercado flotante del distrito de Bang Khun Thian en Bangkok, Tailandia. Se ha acostumbrado a comer toda clase de restos de comida dejados por turistas, el resultado es evidente: ha perdido su figura sobresaliéndole un enorme abdomen, lo que ha limitado su movilidad.
Tailandia es el hogar de cientos de miles de monos salvajes, es común que deambulen libremente, son una atracción popular entre los turistas. Luego que comenzaran a circular una serie de fotografías por las redes sociales, los residentes y visitantes del mercado flotante de Bangkok preocupados ante la sospecha de una posible alteración de salud debido al prominente estómago, han alertado a las autoridades.
Para él todo es delicioso, no desestima cualquier cosa, se ha atiborrado con productos azucarados e hidratos de carbono como: batidos de leche, maíz dulce, fideos instantáneos, melones, mango y otras comidas no aptas para animales.
Con un peso que supera los 26 kilos (60 libras), tiene casi el triple del peso promedio de un macaco salvaje de cola larga de su especie, que por lo general tienen unos 9 kilos (20 libras). Todo gracias a la contribución de los visitantes que le arrojan toda clase de bocadillos y gaseosas.
“No fue fácil atraparlo”, dijo Kacha Phukem, funcionario que participó en el operativo de rescate.
Es líder de su manada y cuando traté de ir por él, tuve que luchar contra una bandada de ellos.
El grupo de conservación de primates tailandés, “Monkey Lovers” o “Amantes de los monos”, en desacuerdo con su traslado a un centro de rehabilitación, insisten que el mono no está enfermo sino gordo, reclaman que sea puesto en libertad.
Sin embargo, a pesar de la polémica generada, “Tío Gordo” fue internado el 19 de mayo. Tendrá que enfrentarse a la tarea de corregir una serie de malos hábitos que había adquirido, además de seguir una rigurosa dieta limitada a 400 gramos de proteína, frutas y vegetales dos veces por día y a una rutina de ejercicio junto a otros animales para perder peso.
“El Tío Gordo” tiene un excesivo sobrepeso porque ha estado comiendo todo lo que la gente le da”.
“No está enfermo, solo necesita ayuda. Le gusta comer y hay un montón de visitantes y turistas que le dan comida todo el día”.
Una táctica de “Tío Gordo” era tener un grupo de monos subordinados encargados de llevarle comida, «lo que quedaba se redistribuía entre los monos más jóvenes”, dijo Supakarn Kaewchot, veterinario a cargo de su nueva dieta.
“Entiendo que la gente sienta pena por los monos y quieran darles de comer cuando los ven”, dijo Supakarn.
Pero por favor no les den comida que a las personas les gusta comer como bocadillos y refrescos. Es muy malo para su salud y el problema es únicamente responsabilidad de los humanos, advirtió.
Hay gente que bromea al ver la enorme panza de “Tio Gordo”, pero la obesidad representa un problema real para su salud. “Después tener algún tiempo comiendo una determinada clase de alimentos para humanos, desarrolló una masa de grasa, que se convirtió en un tipo de tumor benigno”.
Además, expresó que el mono “ahora se encuentra en una condición crítica debido a que existe un alto riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con la obesidad como insuficiencia cardíaca y diabetes”.
Se estima que «Tío Gordo» tiene entre 10 y 15 años de edad, es el “líder de los monos más jóvenes, es un ejemplo pues les enseña cosas importantes, como sobrevivir”, ahora está viejo y le gusta sentarse por ahí a comer mucho. Queremos que los monos permanezcan vagabundeando libremente afuera donde son felices», agregó.
Tío Gordo fue trasladado por el Departamento de Conservación de Parques Nacionales, la Vida Silvestre y Plantas, a un centro de rescate en Nakhon Nayok, a unos 160 kilómetros de distancia del mercado, para monitorear su salud. Mientras, es sometido a una dieta estricta, con suerte y un poco de atención podrá ponerse en forma y ser devuelto a su hábitat natural dentro de unos meses, una vez que haya alcanzado un peso saludable.
Está con personas que se encargarán de cambiar sus malos hábitos alimenticios, sin duda no podrá romper su dieta, regresará en poco tiempo luciendo saludable y con vitalidad al reencuentro con los suyos.
Inspired
“Tío gordo” es un claro ejemplo de por qué no es bueno darle a los animales productos no aptos para su consumo, hacer turismo responsable es un mensaje para compartir incansablemente por el bienestar de todos los animales.