Pierrot es un adorable perrito que los últimos días no solo ha vivido una verdadera pesadilla, sino que ha logrado movilizar a su familia y a una gran cantidad de personas que se unieron para exigir su liberación.
La dueña del perrito creó una campaña para poder salvarlo de ser sacrificado después de que se le acusara de morder a un niño.
A la familia se le informó que no podían regresarle al perrito y que debían firmar un documento aceptando el trágico final.
Desde el momento en el que sucedió el incidente, el perrito fue trasladado al Centro de Control y Atención Animal (CECAA).
Familiares y amigos no sabían nada de Perriot temiendo lo peor, por lo que decidieron acudir a las instalaciones del Centro de Control Animal en Guanajuato, México haciendo una campaña bajo el lema «¡Salvemos a Pierrot!»
Cecilia Angelina López Mora es la dueña del adorable mestizo de 3 años.
Desde hace casi un mes, el perrito se encontraba en cautiverio, en el recinto le realizaron varias pruebas con el fin de determinar qué tan agresivo era para luego ponerlo a dormir.
Sin embargo, las pruebas determinaron que Pierrot no era portador de ningún tipo de enfermedad trasmisible, ni portador de rabia, por lo que decidieron entregar el perro a sus propietarios.
Al perrito le realizaron varias pruebas de conducta.
Si bien el perrito logró regresar con su familia, su dueña tuvo que firmar un acta donde se responsabiliza por todas las acciones de la mascota y debe tomar todas las medidas necesarias para evitar futuros altercados.
Las autoridades determinaron que la familia debía pagar una multa equivalente a 42 dólares por su liberación.
Cecilia contrató abogados para poder salvar al perrito, quien sería sacrificado sin tener pruebas contundentes.
Durante el tiempo que el perrito estuvo encerrado no permitieron que su familia lo viera, el personal del CECAA aseguró que siempre estuvo un espacio cómodo y solo, donde era alimentado y cuidado.
Aunque la familia reconoce que Pierrot cometió un error al morder al niño, aseguran que nunca antes había mostrado señales de agresividad ni con otros perros ni personas, por lo que cuestionan que el perrito haya sido provocado.
Finalmente, este perrito tiene otra oportunidad de vivir y estar con su familia.
Después de todo, el perrito está en casa pero bajo observación por parte de los funcionarios públicos de la Presidencia Municipal de Guanajuato quienes realizarán visitas de revisión para seguir analizando su conducta.
La familia ha vivido verdaderos días de angustia con el latente sentimiento de poder perder para siempre a su amada bola de pelos.
Gracias a todos los que se unieron para salvar al dulce Pierrot. Recordemos que ningún perrito ataca de la nada, debemos ser muy respetuosos con ellos sobre todo si no son nuestras mascotas.
Al igual que las personas los perritos se asustan y activan mecanismo de defensa en situaciones incómodas. Déjanos saber tú opinión y no te vayas sin antes compartir esta historia.