Es muy gratificante ser testigos de historias como esta que nos muestra que la grandeza del amor es un sentimiento que va más allá de las fronteras.
Se trata de dos peregrinas que después de siete meses regresaron desde su país de origen para adoptar a un hermoso amigo peludo que las acompaño durante el recorrido del Camino de Santiago.
Kimiko Uchii y Tamano Hayashi, son dos mujeres japonesas con un inmenso corazón lleno de amor. Viajaron nuevamente de Japón hasta Galicia para reencontrarse con el adorable cachorro que, desde el inicio de la reconocida peregrinación del Camino de Santiago, las acompañó sin alejarse de ellas ni un solo instante.
Recorrieron nuevamente 10.600 km para reencontrarse con el perrito
Este perrito llamado Michi, conquistó el corazón de estas dos mujeres que agradecieron su valiosa compañía en la peregrinación y decidieron volver para adoptarlo y llevarlo con ellas a Japón.
Kimiko y Tamano se encontraron con este amigo peludo en mayo cuando iniciaban el Camino de Santiago y, desde entonces, este adorable cachorro no se separó de ellas hasta que terminaron su etapa.
“Conocimos a Michi en Santiago hace unos meses y ahora hemos vuelto por él para darle un hogar”, contaron las peregrinas.
Kimiko y Tamano llamaron a Protección Civil y confirmaron que el cachorro seguía sin dueño, y la idea de hacer todo el papeleo para cumplir con el proceso de adopción se volvió una realidad.
Raquel Friría Mato, gerente de APACA, la Asociación Protectora de Animales del Camino dijo que el proceso de adopción es un poco largo y puede tener alguna complicación, especialmente cuando se trata de adoptar un animal que debe viajar fuera del país.
“Las adopciones son algo complicado. Para nosotros es inusual mandar animales a otros países, no solemos hacer adopciones lejanas, a no ser que sean casos como este”, dijo Raquel.
Sin embargo, con Kimiko y Tamano todo ha sido diferente, esta adopción tiene una emotiva historia que traspasa las fronteras y que suceden solo en esta peregrinación donde el amor, la fe y la esperanza son los protagonistas.
«Estamos muy felices en Japón y vamos a hacer todo lo posible por hacerlo muy feliz”, dijeron Kimiko y Tamaño.
Después de siete meses, tanto Kimiko y Tamano recibieron el regalo que habían pedido en la carta de Papá Noel.
Ni el idioma, ni la distancia, ni todo el papeleo puede ya separar a Kimiko, Tamaño y Michi. Comparte esta encantadora historia que representa una verdadera celebración de la Navidad.