La vida de los animales salvajes no siempre es tan fácil. A diferencia de los domésticos quienes gozan del cuidado de una familia, éstos se encuentran en la naturaleza. El problema es que, aunque ello no sea necesariamente malo, los expone aún más a contraer todo tipo de enfermedades.
Una de las más frecuentes en este tipo de criaturas silvestres es la sarna. En días pasados fue hallado en la ciudad de Louisville, Kentucky, Estados Unidos, una pequeña zorrita con su pelaje casi totalmente carcomido por esta molesta enfermedad cutánea.
Miembros de la organización en favor de los derechos de los animales, Second Chances Wildlilfe Center, encontraron al animalito y pronto se percataron de la gravedad de su condición.
Los brotes de sarna por todo su cuerpo, incluso llegaron a afectar su vista. Era incapaz de abrir bien los ojos. En verdad, tuvo mucha suerte de toparse con el grupo de activistas, quienes, de inmediato lo trasladaron hacia un centro médico para constatar el estado real de la zorrita.
Allí, entre manos profesionales, dedicadas y amorosas, el ancestral canino comenzó a recibir el tratamiento y los cuidados pertinentes, lo que significó para ella una segunda oportunidad de vida. Un medio de comunicación siguió toda la historia y así fue como nos enteramos de cómo fue su proceso de recuperación.
La sarna había ganado espacio, de modo que no fue fácil curarlo para devolverlo a su hábitat natural. Era muy desconfiada, por eso, todos los días su cuidadora se esforzaba al máximo para hacer de su convalecencia la más confortable posible.
Poco a poco el animal fue recobrando el ánimo y las fuerzas, además de que fue perdiendo el miedo inicial hacia los humanos. De pronto comenzó a darse un cambio radical en su apariencia y volvió lentamente a ser la zorrita que antes fue.
“Su pelaje recobró la vida y el color que siempre tuvo, esos son los efectos de recibir amor”, comentó un usuario.
Una vez que su recuperación fue evidente, lentamente fue liberada en un parque cerrado para que pudiese continuar su proceso de curación mientras no se encontrase en el hospital veterinario.
“Es hermoso ver cómo un grupo de personas pueden cambiar la vida de un animal salvaje, devolviéndole su hermosa piel y también mejorando sus posibilidades en el bosque”, se lee en otro de los comentarios a la publicación.
En realidad, estamos de acuerdo con las opiniones emitidas por los cibernautas, porque el cambio que dio este animal fue indescriptible. Su vida mejoró significativamente gracias a esta noble institución que lo salvó y lo convirtió en la hermosa zorrita que es hoy en día.
Comparte esta historia de amor y dedicación por los animales con tus seres más queridos. Esperemos que la sarna no regrese y que pueda seguir viviendo feliz como lo es ahora.