Para nadie es un secreto que la pandemia del COVID-19 ha causado una de las crisis más grandes a nivel mundial, ha sometido a casi todos los países a una crisis sanitaria y económica.
La protagonista de esta historia no escapa de esta situación, se trata de Meena, una mujer de 39 años que trabaja como doméstica y vive en la localidad de Mylapore, en la ciudad de Chennai, al este de India, con sus 13 perros en una casa de 2 habitaciones.
Durante la pandemia Meena ha hecho todo lo posible por alimentar a sus amigos peludos, con quienes convive durante los últimos 21 años y a los que ama con toda su alma. Para ella sus cachorros representan su conexión con Dios.
Cuando el gobierno anunció la cuarentena inmediatamente pensó que tenía que abastecerse de comida para los perros, y pidió un adelanto de las familias para quienes había estado trabajando desde hace mucho tiempo.
“Me sentí muy incómoda pidiéndoles a los dueños de las casas donde trabajo un adelanto salarial. Pero tuve suerte, 2 de ellos me dieron 2 meses de salario por adelantado. Sabían que tengo una familia de 13 perros que cuidar”, dijo Meena.
Meena afirma que, aunque ella no es de comer mucho tiene que administrar muy bien los alimentos.
“No soy muy aficionada a la comida. Lo que obtengo lo comparto con mis perros. Pero ahora debo tener un poco de cuidado. Como una vez al día y les guardo el resto a los perros”, dijo Meena.
Esta mujer le ha dedicado casi que toda su vida estos cachorros por ellos haría cualquier cosa, incluso dejar de comer para tener con qué alimentarlos.
Meena es una amante de los animales, para ella los perros callejeros son tan queridos como los de su casa.
“Yo también solía alimentar a muchos perros de la calle, pero ahora es difícil para mí hacerlo todos los días. Así que algunos vienen a mi casa a buscarme, pero mis “muchachos” no los dejan entrar. Intentaré encontrar una solución para esto pronto”, agregó Meena.
Lo poco que gana le alcanza para apenas alimentar a sus perros y para ella comer una vez al día, pero todo sacrificio vale la pena por sus por sus amigos peludos, y aunque ha recibido ayuda, ella espera que todo esto pase rápido.
“Algunas ONG me han dado arroz y comida para perros. Puedo arreglármelas con eso, pero no por mucho tiempo. Espero que la situación actual cambie pronto. Esperemos lo mejor”, agregó Meena.
Al igual que Meena, todos estamos deseosos que esta situación quede atrás y sea superada lo más pronto posible. Comparte su historia, ojalá reciba ayuda por parte de las autoridades de su país.