Foxie es una chimpancé que ha llevado una vida muy difícil. Ha dado a luz varias veces y en todas las oportunidades, incluso cuando tuvo unos gemelos, se los arrebataron justo al nacer. Ella nació en el año 1976 y desde el principio tuvo una vida solitaria, siempre sometida a exámenes de laboratorio para hacer pruebas de hepatitis, entre otras cosas. Estaba obligada a reproducirse pero no podía compartir con sus crías.
Cuando se retiró al Chimpanzee Sanctuary Northwest, la persona que la cuidaba en el laboratorio le advirtió al personal del refugio que Foxie no era un animal confiable. Dijo que si la gente se le acercaba mucho, se ponía agresiva.
“Cuando llegó al santuario estaba muy distanciada de los humanos y paranoica con todo lo que tenía a su alrededor”, dijo Diana Goodrich, una trabajadora del lugar. “No jugaba ni tocaba los juguetes u otros artefactos que le damos a los chimpancés” Hasta que de repente ocurrió algo inesperado: adoptó a una muñeca Troll.
Su primera Troll la tuvo en el 2008, desde ese momento ha tenido muchas otras… Con todas ha sido inseparable. “A veces las carga en su espalda como una mamá chimpancé haría con su bebé… contó Goodrich.
“Después de tantos años de depravación, tiene finalmente algo que es para ella”, comentó un usuario en el Facebook del santuario… Y tiene toda la razón. Es un gesto adorable que esta chimpancé haya adoptado así a una muñeca, pero es muy triste saber que detrás de eso hay un pasado trágico.
Si quieres ayudar a animales como Foxie, puedes hacer click aquí. Recuerda que hay muchos casos de animales que viven en laboratorios, encerrados sin posibilidades de tener la vida salvaje y al aire libre que deberían tener…
Ellos nacieron para ser libres y sin embargo algunos humanos no lo comprenden. Espero que cada día haya más santuarios como este y personas que sí se preocupen por la felicidad de los animales.
Te invito a compartir y comentar la conmovedora historia de Foxie ¡Ningún ser vivo merece que lo traten mal!