La atmósfera que envuelve un parque permite entrar a un mundo mágico de ensueño que divierte por igual a grandes y pequeños.
Todo suena perfecto y maravilloso, hasta que vemos cómo han sido capaces de valerse de unos indefensos animales para convertir una clásica atracción infantil en una crueldad.
Con la promesa de brindar al público una fabulosa y entretenida experiencia de cabalgata real, este carrusel reemplazó las coloridas figuras mecánicas por caballos reales.
Un cartel que promueve el paseo dice:
“A diferencia de los caballos de madera tradicionales, realmente puedes experimentar la diversión de montar a caballo y dejar que tu hijo se dé el gusto. Deja que tú y tu hijo sean valientes”.
Las imágenes aparecieron en las redes sociales generando polémica entre los usuarios y las acusaciones de crueldad animal no tardaron en llegar.
Según notas de prensa, el carrusel fue inaugurado hace varios meses en el centro comercial Shuangliu Wanda Plaza, en Chengdu, China. Cuatro caballos con sus cabezas aseguradas a barras metálicas, son obligados a caminar en un espacio reducido y a un ritmo determinado dando vueltas alrededor de una plataforma giratoria, sin que se piense en el malestar y sufrimiento que esto les produce.
Cada caballo camina en promedio cuatro horas diarias y le proporcionan un descanso de una hora. Cobran 50 yuanes (equivalentes a 7,20 dólares) por un trayecto de cuatro minutos.
El propietario de la atracción Shangma Equestrian Club, asegura que los caballos pueden caminar de forma prolongada. Esto se ajusta a sus necesidades y es una buena forma para que ejerciten.
Algunos en la industria no están de acuerdo.
“Los caballos deben caminar mientras siguen voluntariamente las órdenes de sus entrenadores. Esto asegura que sus articulaciones permanezcan en un estado relajado», dijo Zhou Bo, gerente de Tian Xiao Equestrian.
Estos animales son esclavizados con el pretexto de que están haciendo un ejercicio saludable.
A pesar de las acusaciones de crueldad animal, funcionarios del centro local de rescate de vida silvestre dijeron que el carrusel no era ilegal y que los caballos no están siendo maltratados.
«No hay ninguna ley que prohíba que los animales formen parte de las atracciones», dijo Zhou Ming, director de un centro de rescate de vida silvestre en Chengdu.
Bai Xu, director de la seguridad y el bienestar de la Asociación de la Industria China del Caballo, comentó que no había una regulación al respecto, la clave era que el personal controlara el tiempo y la intensidad de la actividad de los animales.
Los jinetes también deben usar equipo de protección, sin embargo, se ha visto que no todos llevan casco.
El fundador de Chengdu Shangma International y propietario de los ponis, identificado sólo por el apellido de su familia Xue, negó que se los someta a un trato injusto.
“Estos caballos fueron entrenados profesionalmente y son muy mansos. La máquina los lleva a caminar y no es un abuso como lo llaman algunos usuarios de Internet”. Además, los entrenadores de los equinos siempre están allí».
«Es un lugar público, no un pastizal. Si no atamos los caballos, ¿cómo podemos controlarlos y garantizar la seguridad de las personas?”, declaró uno de los administradores.
Una mujer que pagó para que su hijo montara uno de los caballos dijo estar de acuerdo, es conveniente que los niños se acerquen a los caballos, además, es mucho más barato que ir a un establo.
Hanspy opinó en Twitter: «No hay nada realmente malo allí. Siempre que los caballos estén bien cuidados, no hay problema. Ok, hay lugares más atractivos para los caballos, pero cada parque ofrece el mismo tipo de paseo”.
A otros les pareció inaceptable, un usuario escribió: «¿Cómo te sentirías si estuvieras conectado a una máquina obligado caminar y dar vueltas durante horas todos los días?»
«Si quieres montar a caballo, puedes ir a un establo profesional». El caballo no es un juguete. Esto es inhumano”, mencionó otro.
El centro comercial decidió suspender la atracción durante la inspección de seguridad, mientras tanto los caballos seguirán entrenando, dijo Xue.
Y después de unos días volverán a ser utilizados en este parque alejados de su naturaleza, hasta que la ciudadanía asuma el rol fundamental de elegir alternativas de ocio que fomenten actitudes de respeto por el bienestar animal.
Para acabar con el trato injusto a los animales se necesitan voces capaces de defender sus derechos. Únete y compártelo.