Los perritos son sumamente aventureros, curiosos y tienen una gran voluntad, cuando se proponen algo simplemente no hay nada que pueda detenerlos. Sin embargo, no todos los días ocurre que un perro tan pequeño, indefenso y tierno, como lo es un pug, deje todas las comodidades de su hogar para embarcarse en una aventura sin rumbo fijo.
Esto fue lo que sucedió recientemente en Escobedo, México cuando un hermoso perrito pug tomó la osada decisión de dejar su hogar, junto con su cama, sus juguetes y un plato de comida segura.
Al parecer, para el perrito la cotidianidad del día a día resultaba poco interesante, necesitaba un poco de acción y aventura para que su vida tuviera sentido. Fue así como salió de su casa con un destino incierto, sin ningún tipo de provisión o alimento, tan solo llevaba sus ilusiones y anhelos de por fin ser libre.
No obstante, sus pequeñas patitas y su redondo cuerpo no le permitieron avanzar mucho en su camino hacia la libertad. En cuestión de minutos, el perrito fue encontrado por tres recolectores del servicio de basura local de la empresa Red Ambiental.
Los hombres intentaron entregar al pequeño con sus padres humanos, pero nadie sabía de dónde venía o quiénes eran sus dueños por lo que decidieron subirlo a la cabina del camión y convertirlo en el copiloto. El esponjoso pug tenía su primer empleo para su vida independiente, aunque probablemente no era lo que tanto había esperado.
Terminar trabajando en un oloroso camión de basura no es el sueño de muchos, sin embargo, bien puede ser que para el animal resultara una aventura interesante, después de todo, lo que quería era viajar y ser independiente.
Desafortunadamente, incluso si el canino estaba conforme con su nueva vida pronto vería todos sus sueños de aventura truncados, puesto que los recolectores de basura encontraron a su familia, quienes se encargarán de cuidarlo mejor y de colocarle un collar con todos sus datos por si vuelve a escapar.
La corta aventura del perrito había terminado de manera abrupta, fue entregado con su dueña para regresar a casa, donde estará seguro, cómodo y donde no tendrá que trabajar nuevamente para tener un plato de croquetas repleto.
«Este pequeño amigo se nos unió en la recolección en el municipio de Escobedo, afortunadamente se reunió con su dueña sano y salvo gracias a la cuadrilla de Red Ambiental que lo resguardó», escribió la empresa de desechos en sus redes sociales.
El perrito se encuentra nuevamente en su hogar, donde podrá estar seguro del peligro de las calles y sus tres héroes sin capa, identificados como Enrique Hernández, Roberto Reina y Teofilo Alejandro, fueron recompensados por su noble acción.
Sin duda alguna, se pueden encontrar personas buenas en los lugares más insospechados, incluso en un camión de basura, lo importante es tener el deseo de ayudar a los más indefensos y desamparados.
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