Muchos animalitos tienen la gran misión de sobrevivir en las calles, unos nacen y crecen bajo este contexto mientras que otros son cruelmente abandonados, en ambos cosas la realidad para los perritos es completamente dura.
No solo deben tolerar la indiferencia de muchas personas que pasan a su lado ignorando que también son seres vivos, también deben lidiar con los múltiples peligros a los que están expuestos. Desafortunadamente, no todos logran sobrevivir y muchos otros padecen entre la vida y la muerte.
Acurrucado y sumergido en el dolor esperaba que lo peor sucediera.
Esta es la historia de un perrito que parecía resignado a un trágico final, se encontraba tirado en la calle agonizando cuando un alma noble decidió brindarle toda la ayuda que el indefenso perrito necesitaba.
Su pequeño cuerpo estaba cansando de luchar, pero al ver que alguien estaba dispuesto hacer algo por él sus hermosos ojos azules tomaron un brillo especial y se llenaron de esperanza. Sin duda, unos verdaderos ángeles se cruzaron en su camino para salvarlo.
Tendido en el suelo y con la mirada perdida cedió ante la ayuda de los rescatistas.
El estado de salud del perrito era crítico, cualquier minuto era importante para poder salvarle la vida, con mucho cuidado sus rescatistas lo trasladaron al centro clínico veterinario donde la prioridad fue estabilizar sus signos vitales.
El veterinario le realizó varios exámenes, era necesario determinar si tenía algún parásito u otras enfermedades, detectó que el perrito tenía un grave problema de desnutrición a punto de convertirse en una anemia severa.
El perrito tenía las encías inflamadas y estaba muy desnutrido.
Le pusieron una vía intravenosa donde le suministraron varios antibióticos.
Era necesario que estuviera hidratado, aunque al principio se negó a comer y beber agua, cedió ante el tratamiento de los voluntarios quienes cada hora lo alimentaban con una jeringa. Con mucha paciencia y dedicación exclusiva este hermoso perrito poco a poco fue mejorando.
Este hermoso ser está enorgulleciendo a sus rescatistas.
Su recuperación ha sido larga pero muy satisfactoria, los suplementos alimenticios, nutrientes, e infusiones de hierro han hecho efecto y esta hermosa bola de pelos ya tiene mejor ánimo, incluso logró ponerse de pie por sí solo.
Aún le queda mucho por recorrer pero confiamos en que en este viaje lo acompañan personas maravillosas dispuestas a sanarlo completamente.
Un cachorrito valiente que sigue luchando por su vida.
Solo es cuestión de tiempo para que sane del todo y reciba alta médica, solo hasta entonces estará listo para poder ser parte de una familia.
Por ahora, este valiente cachorrito sigue recibiendo toda la atención y cuidados amorosos para recuperarse. Oremos por él y por su pronta recuperación. Infinitas gracias a todos lo que han sido parte de este proceso.
Muchos perritos desean ser parte de una familia, esa de la que nunca han tenido la dicha de disfrutar. Anímate hacer la diferencia y se parte del cambio que quieres ver. Adopta y transforma una vida. ¡Comparte!