No hay nada que una madre no esté dispuesta a hacer por sus amados hijos; con ellas aprendemos un sinfín de cosas que nos hacen convertirnos en los mejores adultos, o simplemente divertirnos a lo grande. Como sucedió con una traviesa perrita de dos años de edad que sigue contando con el apoyo incondicional de su madre en todas sus ocurrencias.
Son el mejor dúo
Una perrita golden retriever llamada Harper aprendió todo lo que sabe de su madre Willow. Pero, a los 2 años de edad, hay algunos trucos que todavía tiene que dominar. Afortunadamente, su madre siempre está feliz de ayudar cuando su hija muerde más de lo que puede masticar.
“Willow y Harper pasan todo su tiempo juntas y, por supuesto, ella le ha enseñado muchas cosas. Fue muy lindo ver a Harper a una edad temprana aprender a hacer todo lo que su mamá hizo”, señaló Tanya, la humana de las perritas.
Uno de los pasatiempos preferidos de estas dos perritas es salir a pasear y vaya que saben cómo divertirse. Recientemente, las perritas estaban jugando en su parque local cuando Harper encontró una gran rama de árbol al lado del camino. Ella no podía dejar una rama tan perfecta, así que comenzó a tirar de ella.
Harper logró levantar el palo largo por sí misma, pero se atascó cuando caminó entre dos postes. Willow vio a Harper dejar caer el palo e inmediatamente corrió al rescate. La amorosa madre no iba a dejar que Harper renunciara a su objetivo y perdiera esa increíble rama. Después de todo, ella fue quien le enseñó a Harper cómo llevar un palo grande.
La madre ayudó a su hija a levantar el palo y, compartiendo el peso, maniobró fácilmente más allá de los postes. Las dos se alejaron alegremente, sosteniendo el palo juntas.
“Ambas tienen personalidades determinadas y siempre están muy orgullosas cuando logran sus objetivos. Llevaron el palo durante aproximadamente un kilómetro, alrededor del parque de 5 kilómetros, donde tenían que atravesar cruces peatonales y postes”, dijo la mujer.
Incluso para los demás visitantes del parque resultó increíble el gran trabajo en equipo entre madre e hija, y es que era más que adorable verlas maniobrar por todo el trayecto sin perder su alegría.
“Harper se distrae con la gente que quiere hablar con ella. Pero mamá siempre está ahí para ayudarla a seguir adelante”, señaló Tania.
¡Es increíble!
No cabe duda de que siempre se necesita del amor y apoyo incondicional de una madre, sin importar la edad que se tenga, para afrontar todos los retos que depara la vida. Puedes seguir las aventuras de Willow y Harper en su cuenta de Instagram.
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