No son pocos los países que entrenan a diferentes perros para que sirvan de ayuda en diferentes instituciones, tales como: policía, bomberos, primeros auxilios, entre otros. Y estos perritos, como cualquier otro trabajador, también se jubilan y llega el momento de que los llenen de amor, cuidados y agradecimientos por los servicios prestados.
Es por esto que la fuerza pública de Colombia está impulsando una iniciativa para que varios de estos perritos puedan ser adoptados.
Merecen ser recompensados por su ardua labor
Cafú es uno de estos perritos que buscan un hogar, ya tiene 11 años, y la mayoría los dedicó a operaciones relativas con anti narcóticos, gracias a su buen sentido del olfato y a la destreza de su cuerpo.
Los perritos como Cafú que son empleados en este tipo de labores son cuidados desde antes de nacer, pues sus padres son elegidos con mucha minuciosidad, para posteriormente ser entrenados y estimulados desde muy pequeños, del primero al cuarto mes son meses cruciales para que se desarrollen muchas de sus habilidades por medio de juegos bien estructurados.
Es en esta misma etapa cuando los adiestradores también se encargan de desarrollar al máximo su olfato, y todo esto es mediante un proceso de recompensas, las cuales son de tres tipos: pelota, comida o una recompensa auditiva, que consiste en palabras de ánimo, por ejemplo: “Lo hiciste muy bien, perro”, esta recompensa también puede acompañarse con una recompensa sensitiva, como una caricia.
“Los perros que laboran con las instituciones son increíbles, hacen una labor super importante, y por supuesto que merecen una jubilación digna y llena de amor”, comentó un usuario de redes sociales.
Cafú es uno de los 150 perros que ahora están esperando a ser adoptados y ser recompensados luego de tantos años de labor social, y los integrantes de la fuerza pública esperan que pronto todos puedan estar en su hogar definitivo.
“Todos estos perros dieron lo máximo durante sus años de servicio, ahora buscarles un hogar es la manera de recompensarlos y agradecerles todo su esfuerzo y dedicación”, aseguró uno de los instructores.
Solo quieren un hogar amoroso
Otras de las actividades en las que destacan estos perros entrenados son: detección de explosivos, narcóticos, flora y fauna silvestre, papel moneda, tabaco, licor y actividades de búsqueda. Todos arriesgan sus vidas al cumplir sus trabajos, laboran durante 8 años, y después esperan la mejor jubilación del mundo.
Comparte esta historia para que las personas sepan más sobre los trabajos de estos perros que buscan un hogar definitivo lleno de amor y los cariños que se merecen después de arduos años de trabajo.