Maroesia, de tan solo dos semanas de edad, fue atropellada y abandonada a un lado de la carretera para morir en Febrero del 2015. Ella fue atropellada por una persona irresponsable al volante, lo peor de todo es que el conductor aparte de atropellarla, la dejó ahí para que se desangraba.
Normalmente alguien responsable se encarga de lo que pasó pero ese individuo no lo hizo… Afortunadamente para Maroesia, recibió la ayuda que tanto necesitaba de gente con buena voluntad
Ella estaba a punto de morir hasta que llegó Donkey Sanctuary Bonaire para rescatarla. La fundadora, Marina Mellis, dijo que ella estaba al borde de la muerte, pero que sacó fuerzas para seguir luchando.
Mellis lleva rescatando burros desde hace 23 años. Ella bautizó a la burrita como Maroesia, el nombre de su propia madre.
Tenía rotas las patitas y se le colocaron férulas para ayudarla. Poco tiempo después se pudo poner de pie y estar con sus otros amigos burros en el refugio.
Cualquier veterinario hubiera pensado que ella no lo lograría, pero fue en contra de todo pronóstico y día a día se fue recuperando cada vez más hasta tener la buena vida que ella merecía.
Y un día, después de un año de lo ocurrido, Mellis llegó a la finca y la burra se acercó. Se paró por sí sola y le dio un gran abrazo de agradecimiento por lo que Mellis hizo por ella.
Gracias a estos animales, se ha podido lograr tanto por todo el mundo. Los burros se han usado desde mucho tiempo para cargar y transportar cosas pesadas, han ayudado a llevar comida y medicina a lugares lejanos y lo peor de todo es que son los animales peor tratados ¡no se les aprecia! 🙁 Estos animales merecen un mejor trato. Ningún ser vivo merece ser maltratado y debemos respetarlos como se merecen.
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