Los bomberos, aunque muchas veces no son los mejores recompensados, son héroes inigualables, cada día ponen en riesgo su vida por rescatar a otros de desastres o accidentes. Ellos siempre atienden al llamado, se exponen a todo tipo de situaciones riesgosas, pero siempre están ahí para nosotros. Realmente los humanos no somos los únicos beneficiados, ellos se esfuerzan por salvar a cualquier ser vivo.
Estos bomberos en Oklahoma lo demostraron después de que salvaran a un grupo de personas y animales.
El llamado esta vez vino de la cuadra 10000 de Richmond Drive, en el sureste de la calle 104 y en Hiwassee Road, cuando una casa rodante comenzó a incendiarse. Al principio pensaron que no había nadie, pero realmente en ese lugar vivía una familia con varias mascotas.
Las personas habían logrado salir del lugar, pero sus mascotas aún se encontraban adentro.
Los bomberos llegaron con todo su equipo y extinguieron las llamas, pero lamentablemente en el incendio falleció un perro y un gato que no lograron salir a tiempo del lugar. Lo que dejó el corazón de muchas personas roto; aunque no hubo pérdidas humanas, igual se trataba de dos vidas y cada una de ellas tiene un valor irrecuperable.
Sin embargo, ellos lograron rescatar a una perrita que no dejaba de caminar alrededor de la casa de un lado a otro, esa era una señal que de que había algo en el lugar que aún no habían localizado.
Ellos comenzaron a rastrear muy bien la casa y pronto descubrieron qué era lo que la mascota intentaba decirles.
Debajo de la casa se encontraban sus bebés, unos pequeños cachorros envueltos en el barro que hizo la mezcla de la tierra con el agua, que utilizaron los bomberos para extinguir el incendio. Estaban muy sucios, pero afortunadamente todos estaban muy bien de salud.
No se sabe cómo terminaron ahí, pero se trataba da nada más y nada menos que de nueve cachorros.
Eran pequeños cachorros de tan solo seis semanas de haber nacido, así que los bomberos los tomaron entre acogedoras mantas para ayudarlos a recuperar su temperatura corporal, para que su madre los pudiera alimentar nuevamente y así calmarla.
A pesar de las pérdidas enormes que sufrió la familia, ellos eran una luz de esperanza.
Definitivamente, la labor de estos hombres es impagable; a pesar de la pérdida de dos mascotas, queda la sensación de tranquilidad de haber rescatado a nueve más y haberse esforzado para mantenerlos a salvo. Esta familia aún tiene un largo camino que recorrer para superar este traumático evento, pero estos nueve cachorros darán mucha alegría a su paso. Un merecido aplauso a todos los bomberos.
Comparte esta historia y esperemos que esta familia se recupere pronto de su pérdida.