En Indonesia una pequeña orangután bebé fue rescatada por la International Animal Rescue (IAR), ya que se encontraba viviendo como una mascota bajo los malos e incorrectos cuidados de una familia. El trauma piscológico que presenta esta criatura es algo doloroso y muy lamentable que no debería seguir ocurriendo. Cada día hay más casos como este a causa de la destrucción de la selva tropical por los terremotos… Los animales necesitan más ayuda que nunca y no podemos darles la espalda.
La orangután fue comprada por un hombre llamado Dallan, quien a pesar de ser el responsable de su estado, admitió que no sabía lo que estaba haciendo. Dijo que sentía pena por ella y que no sabía que era ilegal tener un orangután como mascota.
La llamaron Joss, ella vivía en una casa de familia y esa familia no sabía que estaba violando la ley. Aún así, debieron tener más cuidado con el asunto. Afortunadamente el equipo de la IAR llegó al rescate. La entregaron de forma voluntaria.
La IAR publicó un video muy polémico que revela los terribles traumas que esta criatura debió haber sufrido… Se me rompe el corazón al pensar que fue apartada de su hábitat y de su familia por culpa de seres humanos egoístas que no aceptan las características y las necesidades de cada ser vivo.
En el video se muestra claramente cómo esta pequeña no deja de abrazarse, se da golpes contra la pared, se levanta y se sienta muchas veces, no quiere comer… ¡Es verdaderamente lamentable que su salud mental haya llegado a estos niveles!
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La gente de IAR hizo bien en hacer público este video porque es una forma de que la gente tome conciencia de lo que está pasando con los animales que pertenecen a la vida salvaje en lugares como Indonesia.
Hay muchas personas que tienen animales no domésticos como mascotas y eso no está bien. No se trata solamente de que ellos no disfruten o no sean capaces de encariñarse con humanos, es cuestión de que puede ocurrirles lo que le pasó a esta pequeña orangután, que presenta un grave cuadro psicológico.
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