Existen pocas cosas en el mundo tan tiernas como un bebé que intenta imitar a los grandes. Pero a pesar de lo chistoso que pueda resultar ver a un pequeñito poniéndose al revés los zapatos de papá… o, ya sabes, persiguiendo un auto como mamá, es importante comprender que para ellos esto es mucho más que un juego.
Claro que con este último caso hacemos referencia a un bebé rinoceronte, específicamente a uno que protagonizó un video que ha estado robando sonrisas y causando furor estos últimos días.
Para fortuna de todos los espectadores que han visto y disfrutado esta grabación, un aventurero llamado Brendon Arnesen, logró capturar estas adorables imágenes cuando se encontraba haciendo un safari en el parque Hluhluwe-Umfolozi Game Reserve, la reserva natural más antigua de África, en la cual, de hecho, se encuentra la población más grande de rinocerontes blancos en el mundo.
Al principio, se puede ver al bebé rinoceronte con total determinación embistiendo (o mejor dicho, amenazando con embestir) al auto en el que se encuentra Brendon, pero tras unos pocos segundos, la entrada en escena de un segundo auto parece perturbarle aún más, así que se regresa a toda marcha para espantar a los intrusos… Solo que a mitad de camino parece recordar su misión original y se regresa ¡Eso sí, igual de decidido!
«La verdad es que pensamos que era lo más tierno del mundo. Nuestra única preocupación era que la mamá pudiese ponerse protectora con su bebé recién nacido y quisiera atacarnos, pero ella siempre se mantuvo muy calmada y permitiéndole a su cría jugar tranquilamente«, cuenta Brenton, quien no podía creer la suerte que había tenido al encontrarse cara a cara con un rinoceronte pequeñito y juguetón.
«El pequeño rinoceronte se mostraba muy inquisitivo, él quería correr y asustarnos», continúa Brendon. Eventualmente, este temperamental bebé perdió el interés en los autos y se regresó a los arbustos para disfrutar de la protección de su enorme mamá.
El parque permite a los visitantes hacer un recorrido con sus propios vehículos, pero ni Brendon ni sus amigos se esperaron encontrarse con semejante escena.
El Hluhluwe-Imfolozi Game Reserve, ubicado en KwaZulu-Natal, Sudáfrica, es también considerado una joya natural porque en él habitan «los 5 grandes«: el léon africano, el búfalo africano, el leopardo africano, el elefante africano y, por supuesto, el rinoceronte blanco.
Lamentablemente, hoy en día tanto los animales como la vegetación de esta magnífica reserva corren el peligro de perecer debido a los planes de construir una mina a cielo abierto justo en la frontera del parque. Sin duda, una situación absolutamente indignante contra la cual muchas organizaciones se encuentran batallando.
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