La historia del pequeño gatito llamado Alfie empieza cuando vagaba bastante confundido y solo, porque la única familia que él conocía lo había dejado abandonado en su antigua casa. Mientras estaba rondando por el barrio buscando restos de comida, una pareja se le acercó y lo llevaron a casa.
El gatito de dos años de edad, con aspecto esponjoso y de pelaje negro fue encontrado en un retrete destartalado el 3 de marzo de este año después de que sus humanos abandonaron su antigua casa y con ella abandonaron al gatito también.
Rachel Reynolds es una de los rescatadores del pequeño Alfie y ella dice que «él es un gato abandonado, sus dueños se habían mudado y no lo llevaron con ellos, lo descubrimos, estaba hambriento y solitario, dos semanas después de eso».
Rachel y su esposo Ben habían visto a Alfie rodeando por el vecindario y una noche decidieron que cuando salieran del trabajo irían directamente a su rescate. Al momento de encontrarlo, se dieron cuenta lo dulce que era ese chico felpudo, aunque un poco flaco porque no pertenecía a esa vagabunda vida.
La joven pareja sabía que él necesitaba un hogar y el gato que ya tenían, Conrad, quería tener un nuevo hermano con quién compartir y jugar.
«Lo llamamos Alfie, ya que este es un anagrama de ‘a life’ (que significa: una vida). Queríamos mostrar que esta magnífica bola de pelos merecía una vida llena de felicidad y que él no era sólo un número», dijo Rachel.
Cuando estaban buscando al pequeño Alfie, el amigo felino se acercó a Ben y le dio una pequeña charla de maullidos con lo que parecía decir “por favor, ayúdame”.
A Alfie le dieron un poco de alimento, y él tenía tanta hambre que lo comió de manera desesperada, como si nunca hubiese comido antes. Lo que no sabían en el momento era que Alfie venía con algunos problemas de salud.
«Nos dimos cuenta de que no estaba castrado y sin vacunar. Afortunadamente, ya recibió sus primeras vacunas», dijo Rachel. «Él tuvo que ser castrado cuando tuvo un problema con su vejiga bloqueada, probablemente por el estrés del abandono».
La pareja empezó inmediatamente con el tratamiento de Alfie. Después de someterse a una cirugía y de colocarle un catéter, tomó reposo un tiempo, pero el felino esponjoso siguió luchando junto con sus seres humanos.
A pesar de todo, Alfie enfrenta cada obstáculo con ronroneos y cariñitos, él consiguió una nueva fuerza con su nueva familia. Están luchando junto a él por una vida feliz y saludable. Todos los días le aseguran que es amado y que él pertenece allí.
«Alfie ahora está recibiendo tratamiento especializado en un centro felino de excelencia en el Reino Unido y está en su camino hacia la recuperación. ¡Esperamos que pronto pueda venir y vivir en su hogar con su nuevo hermano Conrad!”.
Mientras se encuentra en recuperación, Alfie prefiere que lo mantengan en un lugar alto para ver la televisión que es su actividad favorita.
Si deseas ayudar a Alfie con sus gastos médicos puedes hacer una donación aquí. Y también puedes seguir a Alfie y Conrad en Facebook e Instagram.
Recientemente sus dueños han publicado en Facebook que Conrad está siendo puesto en adopción debido a un incidente que ocurrió en la casa. Conrad es un gato que prefiere tener su espacio y parece no llevarse demasiado bien con otros gatos en una misma casa, es por eso que están buscando algún hogar que sea sólo para él sin otros gatos cerca.
Comparte esta historia con tus amigos y ayuda a Conrad a encontrar un nuevo hogar.