Cada día son más los perritos que terminan abandonados en la calle y se someten a toda clase de peligros para poder conseguir comida y abrigo. En muchas ocasiones los dueños buscan desesperadamente a sus mascotas que se escaparon o extraviaron por alguna razón y comienzan días de incertidumbre para saber si el perrito se encontrará saludable.
Zimba vive con su dueña en la ciudad de Wichita en Kansas, Estados Unidos.
Ese fue el tormento por el que tuvo que pasar la madre de un lindo perrito pit bull llamado Zimba. La joven se encontraba en la carretera con su novio y el perro, pero las cosas comenzaron a salir algo mal y tuvieron una discusión muy acalorada en medio de la vía. De manera muy abrupta, ambos decidieron terminar la relación, pero Zimba quedó en el auto con el exnovio de su dueña sin que ella lograra llevarlo consigo sano y salvo.
El plan original de la pareja era tomar unas vacaciones.
La mujer intentó una y otra vez llamarlo para que le regresara a Zimba, pero su exnovio se negó a contestarle el teléfono. Después, el malvado hombre abandonó a Zimba en Maryland a más de 2000 kilómetros de su hogar.
El camino entre Maryland y el hogar de Zimba toma un día entero de viaje en autopista.
Cuando encontraron al perrito terriblemente asustado y sin saber a dónde ir lo trasladaron a la fundación Caroline County Human Society. Allí descubrieron que el dulce Zimba tenía un microchip con la información de su familia y no podían entender cómo el perro había dado a parar tan lejos de su hogar.
Aun se desconoce el paradero del hombre que abandonó a Zimba.
Cuando contactaron a su dueña ella les explicó la terrible situación con su ex pareja y cómo el inocente perrito terminó siendo víctima del asunto. Afortunadamente, Zimba estaba sano y salvo y sólo era cuestión de lograr que se reuniera con su madre.
En el retorno de Zimba, Zach tuvo que atravesar siete estados.
Zach Holt, un voluntario que había trabajado en constantes ocasiones con el refugio escuchó su historia y quiso aprovechar que tenía la semana completamente libre para ayudar al lindo perrito a volver a casa.
“Zach, nunca dejaré de agradecerte por tomarte la molestia de conducir hasta acá para hacer el sueño de Zimba realidad”.
Tras un largo viaje con Zimba dándole muchos besos de agradecimiento, Zach y el pit bull llegaron a casa y el perrito no cabía en sí de su alegría al comprender que se reencontraría con su madre.
“Zimba ha vuelto sano y salvo. Gracias a todos los que lo apoyaron durante este viaje de regreso a casa”.
La madre de Zimba agradeció efusivamente a Zach y a todos los de la fundación que cuidaron a su lindo perrito. Decidió comentar lo sucedido en las redes y recordar a las personas el enorme valor de los microchips para ayudar que cualquier perro extraviado pueda volver con su familia.
“Nunca habría encontrado a Zimba si no fuese por el microchip. Hay que registrarlos y mantenerlos con la información actualizada”.
Celebramos el hermoso reencuentro entre Zimba y su madre tras unos días de incertidumbre tan difíciles para ambos.
No te vayas sin compartir esta bonita historia para recordar la importancia de poner microchips a las mascotas.