Una familia encontró dos pequeños gatitos atrapados debajo de su casa y cuando lograron sacarlos de allí quedaron verdaderamente impactados. Se trataba de dos hermanos sumamente pequeños, pero uno de ellos era el gato más especial que habían visto jamás: Tenía 4 orejas.
Lo gatitos fueron encontrados en la ciudad de Geelong, al sur de Australia.
Lo llamaron Frankie, como abreviación de Frankekitten y tras varios días de darles los cuidados básicos, decidieron llevarlos a Geelong Animal Welfare Society para que pudieran ser chequeados y reciban atención médica. El pequeño Franke se encontraba en una situación mucho más grave de lo esperado.
“Tenía un ojo muy infectado y herido. Lo llevaron de inmediato a cirugía para quitárselo, ya que era muy doloroso para él”.
Después de su operación, el pequeño Frankie necesitaría del mejor cuidado posible, así que una voluntaria que trabaja en el refugio se ofreció para cuidarlo. Georgi había escuchado rumores en el refugio de que había llegado un gato con 4 orejas, pero pensó que debía tratarse de algún tipo de broma. Cuando finalmente conoció a Frankie quedó impactada con él y supo que tenía que cuidarlo.
“Después de un par de horas de tener a Frankie en casa, supe que se trataba de algo especial y no pude soportar la idea de tener que regresarlo”.
El último año Georgi cuidó casi 100 gatos de manera temporal, pero con Frankie todo fue diferente: decidió adoptarlo.
“Sus orejas extras son una deformación genética. También tiene sobremordida. Necesitará que le quiten algunos dientes en el futuro para evitar que le crezcan en el paladar”.
Frankie es un caso muy especial y necesita de mucha atención médica, pero en GAWS creen que todos los gatos merecen una oportunidad, así que están ayudando a Georgi a cubrir todos los gastos médicos que necesita el pequeño Frankie.
Frankie tiene su propio Instagram con más de 18 mil seguidores.
El hijo de Georgi, Arthur, se convirtió rápidamente en el mejor amigo de Frankie. En poco tiempo se dieron cuenta de que Frankie era un gato muy especial y amoroso. Adora pasar tiempo con los humanos y sobre todo que le den mimos en su par extra de orejitas.
“No puede moverlas, pero le gusta que lo acaricien ahí”.
Lo mejor de todo es que el astuto Frankie aprendió rápidamente a ayudar a su madre en la labor de cuidar a otros gatitos. Cada vez que llega un nuevo gato a la casa, les enseña cómo comportarse y los ayuda a tener confianza en los humanos.
“Él hace todo el trabajo y yo me llevo el crédito”.
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Publiée par Frankenkitten sur Mardi 16 octobre 2018
No cabe duda de que un gatito tan especial como Frankie seguirá robándole muchas sonrisas a todos los que lo conozcan.
Te invitamos a compartir la conmovedora historia de este lindo y especial gatito.