Dos hombres que pescaban en Manitoba, Canadá, nunca pensaron que encontrarían a una camada de cachorritos dejados a su suerte en aquella isla completamente deshabitada.
Junior Cook y su amigo Leon Colombo escucharon unos extraños sonidos que provenían de la isla y sospecharon que algo extraño estaba sucediendo.
Pensaron que los aullidos provenían de lobos, pero en realidad eran unos hermosos cachorritos.
Trataron de dar unos primeros vistazos con ayuda de unos binoculares, pero lo primero que pensaron tras ver algunas sombras negras. Los chillidos parecían pedir ayuda desesperadamente así que no podían quedarse de brazos cruzados. Debían hacer algo.
Junior y Leon estaban en el lago practicando pesca deportiva.
Al día siguiente, los sonidos que parecían el llanto de un animal continuaron, así que decidieron tomar un bote y dirigirse allí a ver qué era lo que estaba sucediendo.
Cuando comenzaron a acercarse a la isla se dieron cuenta de que se trataba de nada menos que 7 pequeños cachorros que no paraban de pedir ayuda.
El lago Cross se encuentra en Manitoba en la zona central de Canadá.
Los cachorros parecen emocionarse al ver que la ayuda está llegando. No paraban de ladrar y correr a todos lados invadidos por la alegría. Movían sus colitas de un lado para otro. Sin embargo, una vez que Cook y Colombo se acercaron más a ellos, comenzaron a mostrarse algo nerviosos.
Según los veterinarios, los cachorros no tenían más de cuatro meses de nacidos.
Los pequeños estaban muy delgados y era notorio que tenían mucho tiempo sin tener contacto con ningún humano.
Los pescadores no tienen idea de cómo llegaron estos pequeños a una isla que está completamente deshabitada y en donde no hay comida para ellos, pero calculan que podían haber estado ahí durante un par de semanas.
“Todo lo que hay son ramas y rocas. Mucha hierba alta y gruesa. No hay más nada. No hay comida ni agua”.
Cook y Colombo no dudaron en entregarles toda la comida que llevaban consigo, pero sabían que esto no sería suficiente. Había que buscar una manera de sacar a estos lindos cachorros de la isla para que lograran sobrevivir.
Después de alimentarlos, regresaron y se pusieron en contacto con la organización Manitoba Animal Alliance que los ayudó a enviarles comida a los perritos. Los rescatistas querían sacarlos de allí lo más rápido posible pero debían organizar el transporte cuidadosamente.
Llamaron a los perritos como personajes del show “Gilligan’s Island”: Gilligan, Skipper, Ginger, Professor, Mary Ann, Thurston Howll III y Mrs. Howell.
Para lograr rescatarlos, sabían que tenían trabajar en ganarse su confianza, así que durante los días siguientes continuaron visitándolos y llevándoles comida y agua a la isla.
También decidieron llevarles algunas medicinas en caso de que alguno pudiese necesitarla. Cook estaba preocupado de que todos los perritos estuvieron expuestos a la intemperie, así que trasladó la casa de su propio perrito para que pudieran tener un lugar donde protegerse.
Durante dos días transportaron suministros y jaulas para llevar a los perritos.
Una vez que los perros confiaban por completo en ellos, los trasladaron a un hogar temporal al que fueron ubicados con la ayuda de la fundación Winnipeg Pet Rescue Shelter. Ahora los pequeños se están recuperando para encontrar pronto un hogar definitivo.
“Dos de las chicas son un poco más tímidas, pero el resto de ellos está como si nada hubiese sucedido. No paran de divertirse con sus juguetes”.
Fueron unos días agotadores. Junior y Leon lo dejaron todo para ayudar a estos hermosos cachorros y cuando supieron que irían a sus nuevos hogares, fueron a despedirse de ellos con el corazón hinchado.
Gracias a su enorme corazón, estos hermosos perritos podrán crecer sanos y salvos. ¡No merecían pasar penurias en aquella isla deshabitada!