Los perros son unos seres vivos sorprendentes que se caracterizan por brindar su amor de manera incondicional a todo aquel que los rodea, sobre todo cuando se trata de sus adorados hijos a los cuales protegen de cualquier adversidad y sufrimiento.
Esto fue lo que sucedió recientemente con una linda perrita, llamada Sookie, y con Dino quienes vivían en las calles de Monroeville, Alabama y fueron trasladados a un ocupado refugio de tal condado.
«La gente había visto a los perros corriendo por las calles. Estaban muriendo de hambre y algunas personas les tenían miedo, algo que no tiene sentido para mí, por lo que intervino control de animales y los llevó al refugio», señaló Edi Kelley, director de Paws Crossed Dog Rescue.
La condición de ambos perros era bastante delicada: estaban muy enfermos; Sookie estaba a punto de dar a luz a una nueva camada; y Dino se encontraba totalmente horrorizado con el lugar. Por ello, los encargados del refugio decidieron mantenerlos juntos para que Dino pudiese acurrucarse con Sookie.
Dino temía de todo lo que escuchaba y veía en el refugio, su único consuelo era Sookie
«Son inseparables. Es una relación muy dulce y dependen el uno del otro», dijo Kelley.
Cuando encontraron a los perros fue difícil determinar qué tipo de relación mantenían ambos; sin embargo, debido a su gran parecido físico y al comportamiento protector de la perrita, el personal del refugio asumió que eran madre e hijo.
En el siguiente vídeo podemos ver a Sookie y Dino, así como a los demás perros del refugio, desesperados por salir de sus jaulas
Publiée par Trisha Davis sur Lundi 24 septembre 2018
«Él es mucho más joven y no actúa como un perro que es su compañero sino como un niño. Se inclina hacia la perrita y mete su cabeza debajo de la de Sookie. No la pierde de vista ni un solo instante y necesita estar en contacto físico con ella, de lo contrario se pone muy estresado», aseveró Kelley.
El tormento de Dino en el lugar era más insoportable durante las noches, cuando los encargados del refugio lo separaban de su madre porque podría tener a su nueva camada en cualquier momento.
«El perro aúlla y llora, es horrible. Se agota a sí mismo durante horas y horas. Tan pronto como se reúnen por la mañana, consigue calmarse y relajarse por completo. Le gusta estar a su lado y odia separarse de ella», mencionó Edi.
La desesperación de Dino se debe a que ha tenido muy poco contacto con las personas, contrario a Sookie quien seguramente debió tener un hogar en algún momento de su vida y ama ser el centro de atención.
Sookie debió ser abandonada por su familia porque muestra un comportamiento bastante sociable con las personas
«La perrita es muy sociable, por lo que en algún momento a lo largo de su historia, ha tenido contacto con la gente. Sookie mueve la cola y disfruta siendo una mascota. Dino es muy asustadizo con las personas. No muestra un comportamiento agresivo, no gruñe ni muestra los dientes, pero cada vez que una persona se le acerca, se esconde debajo de su madre. No está acostumbrado a que lo toquen, cuando intentas acariciarlo retrocede como si fueses a golpearlo», dijo Edi.
Afortunadamente, Sookie y Dino han sido trasladados a un hogar adoptivo para que puedan sentirse más cómodos y finalmente han nacido los hermosos cachorros de la perrita. Aunque dio a luz a 10 bebés, debido a su grave estado de salud, solo lograron salvarse 6 de ellos y ahora ella está encontrando consuelo en Dino.
Actualmente, Sookie cuida de sus 6 cachorros, Dino está aprendiendo a socializar con las personas y cada día depende menos de su madre
Monroe County Alabama Animal Shelter
Toda la familia permanecerá en el hogar adoptivo hasta que los cachorros tengan 4 meses de edad. Posteriormente, serán puestos en adopción para que por fin puedan tener un hogar amoroso y, ante todo, el refugio luchará para que Sookie y Dino puedan permanecer juntos.
Su madre adoptiva compartió una imagen en la que se puede ver al adorable par en el relax de su hogar, sin que nada les perturbe, sin que nada les asuste…
Sin duda alguna, lo ocurrido con Sookie y Dino nos muestra que el amor de una madre no tiene límites y sobre todo nos recuerda que los animales sienten tanto como nosotros, debemos quererlos y cuidarlos para que puedan vivir felizmente.
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