Jessica Clayborn es una mujer mayor que hace vida en la ciudad de Zebulon, Carolina del Norte. Debido a que Jessica vive rodeada de árboles y pantanos, es normal que escuche ruidos provenientes de los alrededores de su casa, sin embargo, no suele prestarle mucha atención a los ruidos que pueda producir la vida salvaje que se encuentra ahí, hasta el martes pasado.
Mientras Jessica colgaba la ropa que había lavado durante la mañana para que se secara en el jardín de su casa, logró escuchar unos pequeños gritos que provenían de la maleza que se dirigía hacia los pantanos, y debido a que no paraban, decidió que lo mejor que podía hacer sería seguirlos y ver de qué de trataba.
La maleza era tan espesa que no podía ver nada
Mientras más se adentraba en el lugar, Jessica comenzó a luchar con el pantano fangoso y las plantas que se encuentran a su alrededor, hasta que finalmente logró ver de qué se trataba todo ese alboroto: Un pequeño cachorrito de tan sólo dos meses atado a un arbol rodeado de fango.
Este pequeño perrito de color marrón, llamado Nash después de este accidente, estaba forcejeando contra la cuerda a tal punto que le cortaba el cuello de una manera muy brusca, por lo que Jessica supo que esta vez tenía que hacer algo al respecto y rescatar a Nash.
El pobre Nash sufrió mucho estando amarrado en ese terrible lugar
Para poder hacerlo, Jessica tuvo que luchar aún más con el fango, metiéndose con todas sus fuerzas hasta las rodillas en él y utilizando una navaja para poder cortar la cuerda que estaba maltratando a Nash.
Si bien es cierto que no hay manera de saber cuánto tiempo estuvo Nash amarrado y rogando por ayuda en ese pantano, su cuello estaba muy afectado debido a la profunda herida que le dejó la cuerda. Además, muchos insectos cubrían tanto su piel como sus orejas, lo que acabó causándole un fuerte daño en el canal auditivo.
El pequeño quedó extremadamente cansado tras ser rescatado
Lo único que daba a conocer parte del terrible pasado que sufrió Nash fueron las quemaduras químicas que tenia en sus orejas y cola, haciendo notar que era torturado por quien quiera que fuese su anterior dueño, y que lo mejor que le pudo haber pasado al pequeño fue que Jessica lo encontrara.
Si no hubiese sido así, Nash habría muerto debido a su herida, o habría sido el bocadillo perfecto para los coyotes y linces salvajes que suelen hacer vida por la zona.
¿Qué tipo de persona puede ser capaz de hacerle daño a un cachorrito?
Al regresar a su casa, Jessica se dedicó a darle un extenso baño al pequeño Nash, en donde se dio cuenta de lo relajado que estaba después de que alguien lo rescatara de esa terrible experiencia.
Lograron conseguir un collar de su tamaño que le ayude a sanar
Después de esto, Jessica prefirió dejarle sus heridas a algún experto, por lo que llevó a Nash al Hospital Care First Animal, donde le administraron antibióticos y comenzaron un tratamiento especial para sus heridas. En poco más de una semana, Nash ha logrado tener una excelente evolución en su recuperación, por lo que está terminando su curación dentro de un hogar temporal.
¡Mira qué tierno es!
Sin embargo, debido a su falta de respuesta al sonido, los padres temporales de Nash creen que pudo haber quedado sordo, pero aunque no se está muy claro qué fue lo que lo causó, esto no impedirá que Nash pueda tener una excelente vida con una familia que lo quiera.
En este vídeo podrás ver parte de la recuperación de Nash, y la persona que lo rescató.
Al principio Nash solía ser tímido, pero poco a poco ha logrado relajarse y parece estar muy feliz de tener un sitio donde correr y jugar con sus amigos.
Te invitamos a compartir esta historia con otras personas para motivarlos a ayudar a rescatar a aquellos animales menos afortunados. ¡Juntos somos más!