En 2006 una investigación policial permitió el rescate de varios perros en una granja de Colombia. Las investigaciones indicaron que se trataba de una clínica veterinaria falsa, en donde se operaban cachorros para usarlos como “mulas” y poder usarlos para ingresar heroína en los Estados Unidos.
La granja estaba ubicada en la localidad de Medellín en Colombia.
Una de las sobrevivientes fue una perrita rottweiler, y el otro un pequeño sabueso. Sin embargo, los otros perros no corrieron la misma suerte: 5 se escaparon asustados en medio de la requisa del lugar, y otros tres cachorros murieron a causa de las infecciones que les produjo la operación para esconder bolsas con heroína en su vientre.
Uno de los cachorros sobrevivientes fue adoptado por la Policía y entrenada para detectar drogas. El otro es actualmente la mascota de un oficial.
Las investigaciones oficiales señalan que un cartel de Colombia utilizaba la estrategia de presentar a los cachorros en un show para perros y lograr así burlar la vigilancia de los aeropuertos. En el 2006 ya se habían rastreado y arrestado a 21 personas involucradas en las acciones de este cartel a lo largo de varias ciudades de Colombia y una en Carolina del Norte. Pero uno de los mayores involucrados en las acciones, el veterinario que realizó los implantes en los cachorros, había escapado.
Andrés López Elorez nunca recibió entrenamiento formal como veterinario.
Su nombre es Andrés López Elorez, es de nacionalidad colombo – venezolana. En los años de persecución al cartel, huyó a España y allí pudo empezar una nueva vida. Estuvo trabajando como veterinario en Los Nogales, España. Se casó y tuvo dos hijos, pero en 2015 dieron con su paradero a través de una pista que revelaron a las autoridades en una llamada anónima.
Los paquetes encontrados eran de cerca de medio kilo; pero llegaban a insertar en un cachorro hasta tres kilos.
Finalmente, después de dos años fue extraditado a Estados Unidos en donde un oficial de la DEA señala sus acciones como “Uno de los métodos de contrabando más indignantes”. Las investigaciones también señalan:
“Los cachorros rescatados en el 2006 probablemente iban a ser asesinados para poder extraer las drogas”.
A Andrés López Elorez le puede esperar hasta una década de cárcel en Estados Unidos.
Por suerte, López fue extraditado y procesado por la corte de Brooklyn; pero este caso despierta las alertas sobre el trato inhumano que se le dio a estos perritos. Parece que cada vez comienzan a utilizar más a menudo cachorros indefensos poniendo en alto riesgo su salud. ¡Esto no lo podemos permitir!
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