Un perro leal ha protagonizado una de las escenas más conmovedoras, haciendo de todo por resucitar a su amigo en plena calle.
Nadie le explicó a un perro cómo amar al prójimo como a sí mismo, sabiamente la naturaleza le ha dado la capacidad de la que muchos carecen. Su actitud desinteresada lo impulsa siempre a ayudar.
El insuperable instinto protector que tienen estos animales es admirable. Urge ver un cambio en las personas que solo se quedan mirando el dolor ajeno, y aprendan un poco más de estos maravillosos seres.
Cuando realmente nota que necesitas ayuda jamás se hará el desentendido. Será el primero en acudir y el último en dejarte, de alguna forma te hará saber que cuentas con él, nadie lo separará de tu lado porque es leal y sus sentimientos genuinos, hasta el final.
Un perro leal fue grabado luchando con todas sus fuerzas por resucitar a su amigo
Hay lecciones de vida imborrables, nos arrancan un pedacito de alma. Y es así como contemplamos que a partir de un triste episodio, el gran corazón de estos animales les permite vincularse de manera incondicional; no solo con las personas sino con otros animales sean o no de su misma especie.
En medio del dolor son capaces de tener emociones tan intensas, que dan la impresión de comprender la muerte casi como los seres humanos.
Bajo un cielo cubierto de nubes están dos perros sobre el asfalto; por desgracia acaba de ocurrir un lamentable accidente.
Uno de ellos fue atropellado por un auto, a su lado está su compañero intentando desesperadamente reanimarlo, sin importar el peligro, arriesga su propia vida para cuidar de su amigo herido.
A pesar del tráfico, se queda todo el tiempo junto al cuerpo que quedó tendido en el pavimento de la concurrida carretera de Quzhou, en la provincia de Zhejiang, en el este de China.
Tras el accidente, el perro de pelaje blanco trata por todos los medios posibles de revivir a su compañero; aun sin poder creer que haya muerto, trata de moverlo, gime, le ladra una y otra vez, pero éste no reacciona.
Luce agitado, visiblemente tiene una enorme angustia al no obtener respuesta alguna. Pero los intentos del animal son infructuosos, su fiel amigo estaba sin vida.
Conforme avanzan los minutos, su objetivo se vuelve imposible, ya es demasiado tarde. El perro blanco finalmente, decide hacer lo único que podía, quedarse protegiendo el cuerpo.
Tiritando y cabizbajo permaneció al lado de su difunto amigo durante mucho tiempo; mientras tanto, los vehículos seguían transitando a ambos lados.
Quieren avanzar sin importarles lo que está sucediendo a unos pocos metros, tocan la bocina y sólo quieren esquivarlos como si nada hubiese ocurrido.
Alguien que capturó el momento con su cámara, difundió el vídeo en la plataforma china «Pear Video», desde donde corrió como la pólvora al mundo entero.
Las escenas tocan millones de corazones:
Entre los comentarios, hay quien critica a la persona que decidió filmar el vídeo:
“Un perro acaba de ser atropellado, cogeré mi cámara y lo grabaré sin hacer nada… ¡sólo por los likes!”, ironiza un usuario.
Fue su compañero hasta el final; sin duda, estamos ante una escena sobrecogedora que dice mucho de los animales y demuestra una vez más que los perros también sienten la pérdida de un compañero con tanta intensidad como una persona.
Es una emotiva y frustrante escena en la que vemos cómo la lealtad de un perro a veces supera los cánones humanos.
Impacta más porque este perro con una mirada desoladora no encuentra consuelo alrededor. Muchos alabaron la admirable actitud del perro, pero tristemente ninguna persona tuvo la intención de acercarse hasta los animales.
Es realmente lamentable la falta de empatía humana de todos los testigos
Al principio se pensó que se trataba de animales de la calle. Según reporte de medios chinos, finalmente llegó una mujer que señalaba ser la dueña de ambos perros e incluso los llamó por su nombre y pidió ayuda a los policías presentes.
Tomó al can fallecido hacia la orilla de la carretera, mientras su amigo lo seguía esperanzado moviendo su cola.
Esperamos que haya podido encontrar consuelo para su corazón destrozado por la pérdida de su amigo. Es una historia que nos debe dar mucho para pensar… ¡Y actuar!