Hay algo especial en los animales bebés que los hace tan adorables. Cada vez que los vemos nos derretimos por su dulce inocencia que los hace tan abrazables. Todos tienen esos ojitos brillantes, que parece que ven directo dentro de nuestro corazón.
La pequeña potranca Itty Bitty no es la excepción, de hecho por animalitos como ella es que nos encantan los bebés.
Cuando Itty Bitty nació, pesaba menos de 6 kilos y medía tan solo 35 centímetros.
Ciertamente Itty Bitty es una caballo miniatura, pero aún para su raza ella es bastante pequeña.
Linda Woods es la orgullosa dueña este pequeño caballito, y lo adquirió desde antes de su nacimiento.
La madre de Itty Bitty, Jazz, estaba preñada junto con otras 3 yeguas en la finca de Diana Gilger, donde Itty Bitty nació.
El Rancho Mystic Rock Miniatures en Guthrie, Oklahoma, es una granja de cría de caballos miniatura.
Su dueña, Diana hizo un intercambio con Linda y James Woods, ellos construirían unos establos para ella y a cambio podrían escoger entre una de las tres yeguas preñadas para llevarse al pequeño cuando naciera.
Linda y james Woods tienen una misión muy especial para Itty Bitty “Hope” (Pequeñita Esperanza), como les gusta llamarla.
Ella se convertirá en un caballo de terapias apenas esté lo suficiente grande y fuerte como para dejar el rancho y comenzar su entrenamiento.
Los Woods tienen su propia ONG llamada “Mini Hooves of Love” (Mini Cascos de Amor) a través de la cual realizan visitas terapéuticas a hospitales, ancianatos y establecimientos de niños especiales.
También tienen un grupo de niños con Síndrome de Down que visitan las instalaciones de forma regular para terapias.
Ellos escogieron a Jazz de entre las 3 yeguas porque era la más pequeña y su pancita realmente no mostraba su embarazo, por eso sabían que el potro sería pequeño.
Pero nunca se imaginaron que tendrían al caballo más pequeño del mundo para sus terapias.
Este es el trabajo perfecto para un caballo de su estatura.
Los niños de Diana juegan con Itty Bitty todas las noches, para prepararla para su labor en la ONG de los Woods.
Por ahora la pequeña Itty Bitty todavía está lactando, por lo que no puede estar más de una hora lejos de su madre.
Pero Diana afirma que la pequeña Hope tiene el carácter perfecto para un caballo terapéutico:
“Ella es muy dulce, un poco tímida y muy tierna.”
Ser pequeño casi nunca está asociado con algo positivo, pero para una yegua que podrá ir a hospitales, ancianatos y orfelinatos, es el tamaño perfecto.
Itty Bitty podrá alegrar la vida de muchísimos niños y ancianos que sueñan con tocar y jugar con un caballo de verdad.
Comparte la belleza de este hermoso ejemplar de caballo miniatura y su dulzura con todos. ¡Es adorable!