Te hemos mostrado la vida de muchos animales que ayudan a los humanos en la mejoría de su salud tanto emocional como física, y así brindarle ánimos para superar las duras batallas de la vida.
Esta vez tenemos la historia de una hermosa golden retriever llamada Idina, la perrita trabaja junto a la pareja de médicos formada por la Dra. Mary Greiner y el Dr. Hans Greiner en el Hospital Infantil de Cincinnati.
Idina se formó en Canine Assistants, un centro de formación para perros de terapia, siendo una de las mejores estudiantes; por esa razón, rápidamente logró convertirse en parte del Programa Animal de Terapia Asistida en el Hospital Infantil de Cincinnati.
En el hospital ya se encuentran dos amigos peludos, Chevy y Leica, y los tres forman el equipo de Child Life, el programa que se encargaba de minimizar el estrés y la ansiedad que genera estar pasando por un deficiente estado de salud en los niños.
Idina se ha convertido en un can muy especial para el hospital porque al igual que sus compañeros, hace un excelente trabajo. Sin embargo, sus dueños no son especialistas en perros de terapia, sus dueños son los doctores Greiners, que al igual que ella, tratan a los niños enfermos del hospital infantil.
Así que desde muy temprano el trío de Greiners va al hospital como un equipo y la perrita divide su tiempo en trabajar con su mamá humana y después con su papá humano.
Hans e Idina atienden en el área de neurología y a la unidad de neurociencia. Idina se encarga de ayudar a los niños que están pasando por cuadros de ansiedad y logra que los pequeños se sienten más calmados y contentos consigo mismos.
«Creo que ella se convierte en algo positivo para ellos. Normalmente, cada vez que vas al médico, lo ves como algo negativo. Pero ahora, cuando los niños acuden al médico y ven a la perrita, les recuerda que no hay nada de malo al respecto”, dice el Dr. Hans Greiners.
Los días en que Idina no acompaña a su papá va a acompañar a su mamá, la Dra. Mary Greiners, en la Clínica de Atención Primaria. En esta parte del hospital, la perrita puede atender a todo tipo de niños, muchos de los cuales se encuentran en hogares de acogida. En esta ocasión, Idina se toma el tiempo para entablar relaciones especiales con cada uno de los visitantes y brindarle un espacio sano y seguro para recordar sobre el hospital.
Los avances en los cambios de perspectiva que ha logrado Idina con los niños que visitan el hospital ha sido increíble. Ahora la atención de los niños se enfoca en ella y en los otros dos canes, olvidando por completo las experiencias negativas.
Disfruta viendo a Idina en acción:
¿No te parece una buena manera de combatir los temores? ¡Comenta y comparte la historia de esta sonriente perrita de terapia con tus amigos!