Adoptar una mascota es un gran paso en muchos sentidos, generalmente son perros y gatos que van a depender de ti, requieren atención, cuidados y principalmente muchísimo amor. Además, los trabajadores de los refugios siempre nos recuerdan que adoptar a un animal no es solo dar un techo, es salvar una vida. Cuando adoptamos una mascota, queda espacio libre en los refugios y más animales en estado de abandono tienen la posibilidad de llegar a ellos para que los ayuden a conseguir nuevos hogares.
Por lo tanto, no solo salvas al animal que escojas como mascota, sino a un futuro residente del refugio.
Sin embargo, muchas personas aunque sean amantes de los animales, no están 100% seguras de adoptar un compañero o no saben qué tipo de mascota desean llevar a casa. Por esto, los refugios ofrecen la adopción temporal o periodos de crianza, en los que la persona puede ver si el perro o el gato que escogieron se adapta a lo que buscaban.
Además, los periodos de adopción temporal son fundamentales en la adaptación de los animales rescatados para conseguir una familia definitiva.
Existen refugios como Shelter Chic, una organización sin fines de lucro, que gestiona de manera completamente gratuita la adopción temporal. Muchos refugios hacen lo mismo y le entregan a los padres de crianza, el alimento, las medicinas, juguetes y camas durante su estadía.
Otros refugios tienen exigencias diferentes, pero la principal es darle cariño y protección al animal para que pueda adaptarse al ambiente de familia.
Brittany Feldman, presidenta y cofundadora de Shelter Chic, dice que “algunas personas se cohíben de adoptar por vivir en apartamentos pequeños, pero estamos seguros que eso es mucho mejor que vivir en una jaula”.
El contacto humano y sentirse parte de algo los ayuda con su adaptabilidad. Pero, ¿qué pasa si no puedo seguir cuidando de esa mascota?
Lo ideal es que al menos permanezcas dos semanas con la mascota, de esa manera ellos pueden aprender sobre la vida del hogar y tú puedes decidir si deseas realmente la responsabilidad de tener una mascota. Después de ese periodo puedes adoptarlo definitivamente u ofrecerle un hogar temporal a otro animal.
Y no te sientas mal ni comprometido por regresarlo a un refugio, la estadía en tu hogar lo hizo ganar socialmente.
Los trabajadores de los refugios explican que no deben quedarse con la mascota solo por compromiso, ya que más adelante puede venir una familia que sí lo quiera con locura y para ti solo sea una carga, es parte de lo que se quiere evitar. Sin embargo, el tiempo en un hogar lo hace más apto para una adopción definitiva.
¿Pueden ofrecer un hogar de crianza las personas que ya tengan una mascota en casa?
Sí, de hecho la interacción con otros animales es buena, pero se debe cumplir con ciertos requisitos como, que se encuentren vacunados, esterilizados o castrados. Además, se debe hacer una presentación previa fuera del hogar para que interactúen y evitar que los animales se vuelvan territoriales o amenazantes.
Un paseo o una tarde de juegos en el parque puede ser un buen comienzo y luego dejarlos en habitaciones separadas si tienes que salir.
Finalmente, si me siento a gusto con la mascota ¿puedo adoptarlo definitivamente?
Por supuesto, si crees que tomaste una buena decisión, que te atrapó con su mirada, sus juegos y sus caricias, puedes gestionar con el refugio su adopción definitiva. Ahora serás 100% responsable de tu mascota, pero te aseguramos que te traerá muchísima alegría y llenará tu hogar de amor.
Tanto perros y gatos en cada refugio, están esperando a alguien que los ayude a prepararse para vivir en un hogar o quedarse en uno.
Si leíste esta historia, estamos seguros de que en tu corazón está el deseo de tener una mascota. Esperamos que te animes a intentarlo, aunque sea como hogar temporal y le des la oportunidad, principalmente a esos animales que necesitan mayor adaptación, como perros y gatos adultos que han vivido largo tiempo en la calle. Estamos seguros de que no te arrepentirás.
Además, puedes compartirlo para que más personas se animen a salvar vidas y crear hogares con mascotas felices.