Todos hemos soñado con paisajes donde lagunas y el mar predominan, un horizonte infinito con un atardecer inigualable y animales que adornen el lugar. Por supuesto, que en estas imágenes no pueden faltar los elegantes y coloridos flamencos, aves hermosas de un color que va del rosa al coral, con esbeltas patas, un cuello largo y una particular forma de pararse. Son animales que pueden medir entre 80 centímetros y 1,40 metros, viven principalmente en salinas y lagunas de agua salobre y se alimentan de crustáceos y algas.
Son aves muy atípicas en comparación del resto de las aves, pero con una gracia que nos maravilla a todos.
Sin embargo, ¿has pensado alguna vez cómo lucen los flamencos bebé? De hecho, nacen después de que la hembra prepare un nido de barro de forma cónica, donde ponen un único huevo, en muy raras ocasiones pueden ser dos, que incuba durante 30 días. El resultado es un pequeño y frágil flamenco de color blanco y patas delgadas.
Se alimentan con una especie de leche producida por la parte superior del tracto digestivo de su madre.
Y en el Aviario Nacional de Pittsburgh, tiene a un pequeñito que les robó el corazón y te lo robará a ti también. Sus cuidadores aseguran que para su edad es bastante desarrollado, que ya intenta abrir sus alas y posarse en una sola pata imitando la postura de un flamenco adulto.
Cuando los flamencos vuelan estiran su cuello y sus patas completamente.
Según Robin Weber, uno de los trabajadores del aviario, él se esfuerza mucho para poder ser un adulto, es una etapa difícil pero él es persistente.
Los visitantes del aviario no pueden dejar de sentir ternura y frecuentemente se detienen a elogiarlo. Además, llama mucho la atención que este pequeñito tiene un plumaje muy esponjoso y sus patas son un poco más fuertes que un flamenco de su edad.
En el momento de las fotos tenía tan solo 4 días de haber nacido.
Definitivamente, la naturaleza se encarga de llenar nuestro corazón de ternura y nos muestra la fragilidad y el esfuerzo con cada animal que nace, pequeñitos que en pocos días son prácticamente independientes o que consiguen los medios para poder pronto adaptarse a su entorno. Esperamos que este pequeñito se convierta en un adulto libre y nos alegre los paisajes con su hermoso plumaje y elegancia.
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