Hay amistades que comienzan un poco tambaleantes, de hecho es bastante frecuente que dos personas que en primer momento no tengan conexión luego se vuelvan los mejores amigos. Y aparentemente también puede ocurrir entre mascotas y dueños, como les ocurrió a JJ Yosh y a su gato adoptado Simon.
Su primer encuentro fue un poco áspero, de hecho Yosh pasó de pensar en un mismo día que los gatos eran lo máximo a considerar si tomó una buena decisión.
La primera noche que Simon estuvo en casa de Yosh, no dejó de maullar y de ninguna manera permitía que su nuevo dueño se acercará a él, fue una locura y no terminó ahí. En la mañana cuando Yosh abrió la puerta, Simon corrió y se perdió de su vista, luego de una búsqueda lo encontró escondido debajo de una gran roca y sin planes de salir pronto de ese lugar.
Yosh no podía seguir esperando, su paciencia estaba terminando y tenía que ir a trabajar.
Sin embargo, pasó toda la jornada pensando en el destino del gatito, quizás había huido por completo o quizás tendría que ponerlo nuevamente en adopción. Si Simon no podía adaptarse, tendría que llevarlo a otro lugar y con otras personas, no era lo que deseaba pero sería lo mejor para ambos.
En cuanto regresó del trabajo lo primero que hizo fue buscar al gatito negro que había proyectado como su amigo.
Pero algo extraño sucedió, el gatito continuaba estando en el mismo lugar, y como si hubiese leído sus pensamientos, esta vez Simon simplemente se dejó agarrar por Yosh sin poner resistencia y con un comportamiento muy dócil. ¡Quizás, solo estaba asustado!
Pero no solo se dejó agarrar, a partir de ese momento se comportó muy cariñoso con su nuevo dueño y compañero.
En ese entonces Yosh supo que no lo tendría que poner en adopción y que sí lograría adaptarse. En vista de que demostró ser un poco aventurero, Yosh decidió darle un poco de aventura y lo llevó a una caminata, no tenía un arnés y tenía miedo de que intentara huir nuevamente, pero no lo hizo, siempre caminó cerca de Yosh.
Una milla, luego otra, y otra, Simon estaba agotado pero se veía feliz.
Así fue como Yosh comenzó a llevarlo a todos sus viajes y aventuras, al principio solo caminatas, luego lo enseñó a caminar con un arnés, luego fueron a acampar, hasta que se volvió un aventurero sin retorno.
Yosh asegura que tiene muchas más habilidades que él y sus amigos.
Es capaz de escalar las paredes más difíciles, no pierde oportunidad de montarse en el kayak y además, mientras Yosh rema, él eventualmente se lanza al agua para nadar un poco. “Es un excelente nadador”, asegura Yosh.
Ha hecho espeleología y conoce cumbres y paisajes increíbles.
Ha viajado tres veces en auto durante más de 20 horas, conoce más lugares que ningún otro gato en el mundo. “Debe ser el gato más afortunado del mundo, pero sinceramente yo siento que soy el más afortunado por tenerlo a él”, comentó Yosh.
“Es como mi hijo y lo amaré hasta la muerte”, agregó.
Nos complace saber que siempre hay personas dispuestas a hacer la vida de sus mascotas lo más maravillosa posible, esperamos que el mundo cada vez tenga más personas así. Si todos pensáramos como Yosh y buscáramos la forma de hacer felices a quien nos rodea y acompaña, tendríamos un mundo maravilloso y lleno de sonrisas.
Comparte esta historia e inspírate, tú también puedes hacer algo maravilloso por tu mascota, la recompensa será verlo feliz.