Los lazos entre la familia son bastante fuertes, ya sea que se trate de personas o de animales, especialmente sin han pasado por alguna dificultad que han logrado superar debido a su unidad.
Por esto no es de sorprender que, una vez que los problemas hayan sido superados, no quieran separarse, ya que además de haberse hecho muy cercanos y de haber fortalecido su relación, desean compartir experiencias mejores y sustituir las malas memorias por una alegres y divertidas.
Esto pasa con cualquier ser vivo, incluyendo a los animales; ellos son criaturas muy inteligentes y leales. Este fue el caso de dos pequeños hermanos gatitos que, a pesar de ser bastante diminutos y de corta edad, tuvieron que juntar fuerzas para poder sobrevivir a un muy triste momento de sus vidas. Sin embargo, este hecho solo logró unirlos más, así que no todo es triste en la historia de estos atigrados y tiernos hermanitos.
Durante un día frío, una familia encontró a los dos pequeños felinos en su cobertizo, parecía que estaban allí en busca de calor y los dos pequeñines se encontraban acurrucados muy juntos para mantener a temperatura sus pequeños cuerpos.
Los dueños de la casa tomaron de inmediato a las pequeñas bolitas de pelo y les dieron refugio en su casa, así como sus respectivos cuidados. En conjunto, los dos animales apenas pesaban 0.650 kilos en total; sin duda, los más pequeños que estas personas habían visto. También intentaron ubicar a la madre de estos hermanitos, pero tristemente no hubo señal de la mamá gata.
Por lo que, además de tener que vivir temperaturas tan bajas, tampoco habían recibido los cuidados de su madre ni mucho menos alimento; los pobres estaban helados y hambrientos cuando fueron encontrados, pero actualmente se encuentran mucho mejor. La familia humana los acogió, cuidó y alimentó, definitivamente ahora están mucho mejor de salud, gracias a estas amables personas.
Indudablemente, estos gatitos han dejado una huella en esta familia, quienes han comentado que los pequeños no podían mantenerse separados, incluso al punto de llorar cuando no se encontraban el uno al otro para poder acurrucarse.
Cuentan que no hubo momento en el que no se abrazaran o estuvieran unidos, decidieron darles los nombres de Rick y Morty a este par de adorables gatitos que encontraban consuelo al estar juntos.
También piensan cuidarlos hasta que estén lo suficientemente grandes para que puedan ser adoptados. Los gatitos están más que agradecidos con sus agradables comidas, camas calentitas y la dicha de poder seguir juntos, con vida y sanos.
Estos dos mininos sí que son una muestra de amor, apoyo y unión incondicional, cualidades que lograron mantenerlos con vida; ahora tienen una salud excelente y un futuro brillante por venir.
Estas pequeñas bolitas atigradas sin duda se merecen un final feliz que ya están alcanzando.
No olvides de compartir la esperanzadora historia de los hermanos gatitos.